"¿De dónde viene ese disparo? —preguntó Adrian— cuando de repente escuchó el sonido de 4 disparos.
—Parece que viene del otro lado jefe —respondió uno de sus hombres—. Sin perder un segundo, se apresuraron inmediatamente hacia esa dirección. Cuando llegó allí, vio a uno de sus hombres disparado en la pierna mientras que el otro estaba muerto. Luego vio a Erika con una pierna sangrando y su cara se quemó aún más con ira.
—¿Quién de vosotros fue el que disparó a Erika?! —exigió con los ojos encendidos.
—Fui yo, jefe pero solo lo hice... ¡Bang! —El hombre no pudo terminar su frase antes de que Adrian apretó el gatillo y le disparó muriendo al instante.
—¡Nadie tiene el derecho de lastimar a mi Erika! —dijo y sus palabras posesivas solo hicieron que Erika se sintiera aún más arrepentida de sus acciones anteriores—. No estaría aquí, rodeada de estas personas de las que intentaba escapar si hubiera sido más cuidadosa.