—¡Esa carne no era una res ordinaria, era claramente... carne de ternera wagyu! —Xiao Yi se quedó pasmado.
Se frotó los ojos otra vez.
La carne de ternera wagyu es muy cara. Cuando Xiao Yi come en restaurantes, ve a los chefs sacando un gran trozo de carne y cortando una rebanada de ella, la cual puede venderse por más de 800 yuanes.
—¡Pero el gran trozo en la mano de Shen Ruojing... era claramente un desperdicio de carne preciosa! —¿Quién acumula carne de ternera wagyu de esa manera? —Xiao Yi se quedó sin palabras. Miró en silencio a Shen Ruojing y Chu Cichen, sintiendo de repente que su presencia se había vuelto más imponente.
En ese momento, también había una discusión en el enjambre de comentarios:
—¿Por qué parece wagyu?
—Quería decir eso cuando ella comió anteayer, pero pensé que no podía ser. Después de todo, ¿cuánto cuesta un refrigerador lleno de wagyu? ¿Más de cien mil? ¿Alguien acumularía tanta carne?
—Pero la textura realmente se parece. ¿Podría ser un accesorio?