Este capítulo está dedicado a @Sacogun. ¡Muchas gracias por el super regalo!
De vuelta en la librería Pequeña Flor.
Iryz estaba dibujando a Zeres otra vez —esta vez mientras él dormía en el piso. El hombre estaba acostado en el piso en lugar de sentarse en su posición habitual contra la pared.
Anoche, ella realmente había soñado algo que creía que ciertamente los llevaría al paradero del libro que él buscaba desesperadamente. Estaba emocionada de contarle más al respecto y no podía esperar para ver su reacción. Estaba segura de que Zeres estaría eufórico con la noticia.
Pero por una vez, el hombre no se despertaba. Iryz pensó que debía de haberse quedado dormido, así que no se movió de su cama y solo alcanzó su bloc de dibujo —ya que era tan buen momento como cualquier otro para aprovechar la oportunidad de dibujarlo.