—¡Braydon Neal, quiero que mueras! —Cain escupía sangre sin parar y se levantó lentamente del suelo. Sus ojos estaban llenos de intención de matar mientras decía con voz ronca.
—Aprecio tu talento, pero si quieres morir, ¡te enviaré en tu camino! —Braydon colocó su mano derecha detrás de su espalda y su mano izquierda estaba llena de relámpagos. Estaba de pie en el cielo oscuro sobre el Monte Woolas, enfrentando el fuerte viento.
En el momento en que el vendaval barrió la cima de la montaña...
—Las artes son el archienemigo de las artes marciales antiguas. Hace tres mil años, los antiguos hechiceros eran Dioses. Reverenciaban las artes y dominaban el mundo —Braydon levantó su mano izquierda y cerró lentamente los ojos.