A medida que avanzaba la noche, la temperatura afuera bajó varios grados. Cristóbal temblaba. Podía escuchar sus dientes chocando entre sí. Podría haberse metido en el coche, pero en su lugar, siguió parado allí, temiendo que Abigail no abriera la puerta.
Cristóbal estaba preocupado de que ella pensara que solo le importaba su comodidad y no podía soportar un poco de frío. Además, quería decirle lo desesperado que estaba por llevarla con él.
Sopló aire en sus palmas y las frotó. Continuó haciendo esto.
Dentro de la casa…
Raquel no podía mantener la calma. Le daba pena ver a Cristóbal afuera en el frío. Por otro lado, Abigail no abría la puerta.
KCn golpeó la puerta por la tercera vez y dijo: "Abi, querida. Él sigue afuera. Ve a buscarlo. Se pondrá enfermo."