Nayara se despierta a las nueve de la mañana con el móvil despertándola. Sale de la cama, coge el móvil y ve un mensaje de Nathaniel que dice:
"Vaya, ángel, me ha emocionado tu mensaje. Te quiero mucho, ángel mío. Eres el ángel más hermoso sobre la faz de la tierra. Cuando te despiertes, mándame un mensaje. Te quiero mucho. Besos."-02:45
Nayara sonríe al leer el mensaje y le envía un mensaje en respuesta:
"Así que somos "kits", porque ahora me has dejado sin palabras. Acabo de despertarme. Voy a hacer las cosas aquí en casa y me voy a casa de Raele. Ya os contaré cuando vuelva. Bjs. Te quiero mucho"-09:02
Sale de su habitación y se dirige al baño. Se asea, se ducha y se pone una falda de cuadros beige y gris con un lazo a un lado y una blusa blanca con el dibujo de un gatito.
Saca la plancha del bolso y se alisa el pelo hasta la cintura. Luego va a la cocina y se prepara el desayuno: una galleta Maisena con requesón y un zumo de naranja para acompañar.
Termina de desayunar, friega los platos y decide ordenar la casa, que está hecha un desastre. Empieza en la cocina, guardando la compra en el armario, y luego ordena el resto, limpiando la casa y barriéndola.
Después sale al balcón y le pone agua y comida a Bambam, limpia el balcón y va al salón a recoger...
***
Cuando termina, mira la hora y ya son las 12.40. Vuelve a ducharse y se pone un vestido rosa con sandalias blancas, se suelta el pelo, se pinta los labios de rosa claro y envía un mensaje a Raele por WhatsApp:
"Raele, ¿estás en casa? - 13:00"
"Raele- Sí, colega. Almuerzo aquí en casa, es bueno ponerse al día -13:01"
"Vale. Voy a salir de casa y estaré allí en un rato. 13:02"
"Raele-Ok. Besos-13:03"
Nayara busca su riñonera y la encuentra unos minutos después en el armario, mete el móvil dentro y algo de dinero para emergencias, se pone sus gafas negras con tinte rosa (sí, lleva gafas, pero no lo comento en la historia) y sale de casa en dirección a la casa de Raele.
Decide caminar para dejar de gastar dinero y dar un paseo.
Llega a casa de su amiga a las 13.31 horas. Llama al timbre y su amiga contesta al cabo de unos minutos y le dice:
- Me alegro tanto de que estés aquí -y la abraza con fuerza-. Te he echado de menos, has desaparecido de casa, loca.
- Yo también te he echado de menos. Estaba arreglando algunas cosas, por eso no sabía nada de ti.
- Bueno, pero entra y vamos a ponernos al día con los cotilleos.
Entran en la casa y se sientan en los bancos de la cocina y Nayara les cuenta todas las novedades desde su primer día de trabajo hasta anoche. Su amiga está atenta a cada palabra y se sorprende al saber que Manoel ha muerto y lo dice:
- Amiga, si te ha dicho esto es porque quiere verte feliz y aprovéchalo, porque nadie tendrá una segunda oportunidad como ésta, así que vuelve con él enseguida".
- Es mejor esperar, porque yo estaba saliendo con Manoel, de hecho, el día que me pidió matrimonio estábamos en el cine y el mismo día murió, así que es muy reciente, pues sólo hace tres días que pasó. Voy a esperar al menos tres meses para salir con alguien, concretamente con Nathaniel.
- Sólo espero que sepa esperarte, pero besarlo no matará a nadie.
- Nos hemos besado un par de veces, pero hasta ahí y no he hecho nada desde que nos casamos.
- Qué dulce. ¿De verdad sólo lo hiciste con él?
- Sí, es a él a quien amo. Pensé que amaba a Manoel, pero no es así, era sólo un afecto especial.
- Entiendo, pero vamos a comer, he hecho lasaña de mozzarella, arroz y para refrescarnos, una Coca-Cola bien fría.
Terminan de comer y, mientras su amiga lava los platos, Nayara los seca.
Terminan al cabo de unos minutos y deciden ver una película en la tele, pero no encuentran ninguna buena, así que optan por ver Titanic en DVD.
Raele decide hacer palomitas para que merienden y se quedan hasta las cuatro de la tarde viendo la película.
Después, Nayara se va a casa porque está cansada y quiere ver a Nathaniel. Decide dar un paseo para distraerse.
Se detiene en la plaza y se sienta a admirar a la gente que pasa con sus familias y sus hijos y se descubre sonriendo y pensando: "¿Alguna vez seré así? Tener una familia feliz".
En ese momento, suena el móvil de Nayara y lo coge:
Nayara: Hola, ¿cómo estás?
Nathaniel: Estoy bien, mi ángel, ¿y tú? Te echo de menos.
Nayara: Estoy bien. Yo también te echo de menos. Estoy aquí en la plaza, pero pronto volveré a casa.
Nathaniel: ¿Puedo ir a visitarte?
Nayara: Sí. Ahora me voy a casa. Te espero allí. Con amor.
Nathaniel: Con amor, ángel. Te quiero mucho.
Sale de la plaza y se dirige a su casa, a la que llega en unos veinte minutos.
Decide darse una ducha y se pone una blusa morada con vaqueros y sandalias blancas y se deja el pelo liso.
Unos minutos después, a las cinco de la tarde, oye que alguien llama al timbre. Sale de su habitación y baja las escaleras hacia la puerta y ve a Nathaniel con algo en las manos:
- Hola, ángel mío. Le da un beso en la frente y le dice: "Te he traído esto".
Le entrega un hermoso ramo de tulipanes lilas y le dice:
- Para el amor de mi vida.
- Vaya, son preciosos. Gracias, ángel.
Entran en casa y pasan el resto del día charlando sobre diversos temas y Nathaniel acariciándole el pelo y cogiendo a Nayara de la mano.
Es medianoche y siguen hablando y ella le pide que duerma en su casa y él acepta. Nayara se levanta del sofá, va a la cocina a por la ración y le pone algo de comida al pequeño, luego va a su dormitorio, se da una ducha de diez minutos, se pone lencería roja y un abrigo y baja a por una almohada y una manta para Nathaniel.
Cuando llega, la abraza por detrás y la acerca al sofá para que se siente, y dice:
- Vaya, qué mujer más guapa.
- Eres preciosa".
- Ven aquí- la acerca y comienza un apasionado beso, diciendo: "No puedo dejar de besarte cuando estás cerca de mí durante mucho tiempo.
- Yo tampoco puedo.
Empiezan a besarse y pasan mucho tiempo juntos. Nayara le coge la mano y se la pone al lado del corazón y le susurra:
"Mira lo que siente mi corazón al estar de nuevo cerca de ti".
Nathaniel abre una gran sonrisa y susurra: "Me encanta cuando dices eso. Te quiero mucho y mi corazón se ha acelerado desde que te vi".
Siguen besándose y acaban haciendo el amor en el sofá del salón. Luego se abrazan y se acarician la cara y él susurra:
"¿Te puedes creer que no le he hecho nada?".
Nayara sonríe y dice:
"¿Y me creerás si te digo lo mismo, que nunca lo he hecho con nadie más que contigo?".
- Te quiero, Nayara, y esperaré lo que haga falta para volver a tenerte en mi vida. Sé que esta frase es un poco cliché, pero te amo demasiado, mi belleza.
- Te quiero Nathaniel. Te amo demasiado, mi ángel. Sólo quiero esperar un poco, porque todos necesitamos tiempo para pensar en la vida, pero no tienes que dudar de mis sentimientos por ti, porque mi corazón siempre ha sido tuyo.
- Nayara, mi corazón ha sido tuyo desde que tenía ocho años y respetaré tu tiempo, sólo no me pidas que deje de besarte, porque es difícil.
- Está bien, ángel. ¿Nos vamos a dormir?
- Vamos - le acaricia la mejilla.
- ¿Duermes conmigo? - vuelve a besarle, esta vez con más ganas.
- Sí -sonríe y la lleva a su habitación-, te quiero.
- Te quiero más.
- Ah! pero de verdad que no.
Suben a la habitación de ella y se duchan juntos, Nayara se pone un camisón rosa claro y Nathaniel se pone unos pantalones de punto y una camisa blanca y luego se van a la cama, donde duermen abrazados.
Continua...