- Cuando llegue a este mundo, sabía que las cosas no iván hacer fáciles.... Pero esto es una ¡MIERDA!, durante todo este año desde que llegue, no a pasado un sólo día que no pensará en matar al bastardo que comparto mi sangre, calmate... Calmate.... Respira -
* inhala* *exhala*
- Bien, ¿En donde estaba?.... Así, el bartardo no le importa si nosotros vivimos o no, mientras el tenga suficiente dinero, (que se lo roba a mi madre), para emborracharse y cojer con putas de la calle, se mantiene alejado de nosotros, pero las otras veces.... Sólo lo veo.... Como la golpe.... Sin que yo pueda hacer nada.... Durante todo este tiempo, trate de verdad que lo hice, en despertar mi línea de sangre.... Pero nada.... Trate de detenerlo pero mi cuerpo era muy pequeño y frágil, un solo golpe suyo fue suficiente para romper una de mis costillas, haciéndome ir de urgencia y colocar más carga económica a mi madre.... ¿Y saben lo que hizo después? Se fue de fiesta, mientras yo luchaba para mantenerme vivo y mi madre llorando.... El se fue de fiesta....-
- Pero eso se acabó, hoy se cumple el año desde que recibí el {AMULETO: NIÑO DE GRIMM} y ahora estoy preparando, me encontraba en el baño en medio de la noche y me imagino que se preguntarán ¿Como llegué aquí? Pues simple, caminando, comencé a caminar como a los 8 meses, debieron ver la cara de felicidad de mi madre al verme caminar.... pero dejando eso de lado, es momento de saludar a mi nuevo compañero -
Sentado en el suelo del baño se encontraba Akira, espero cualquier cosa que pasara, llamas saliendo de todos los lugares, un dolor inigualable o que incluso el mismo Grimm apareciera, pero todo eso fue olvidado, ya que en tan solo un parpadeó se encontraba en un infinito abismo de oscuridad, mirando a todas partes en estado de shock, ya que en tan solo un segundo atrás estaba en el baño para después estar aquí rodeado de oscuridad
- ¿Ok?, ¿Que se supone que haga?
*Flush*
Como si su pregunta fuera respondida, una llama carmesí apareció en el aire alumbrado una alfombra roja
- tal vez y solo tal vez, debería ir allá -
Levantándose del suelo, con paso lento pero firmé, Akira seguía la alfombra y mientras avanzaba más llamas carmesí se encendía iluminado la oscuridad
Después de un tiempo incalculable, Akira se encontraba al final de la alfombra, pero lo único que vio fue oscuridad más adelante, sin comprender solo pudo mirar a los lados en busca de respuestas que nunca iván a llegar
*Risa*
*Risa*
*Risa*
*Risa*
*Risa*
De repente, en medio de la oscuridad unas risas siniestras hicieron presencia
*Flush*
Todo el espacio oscuro fue envuelto en una gran llama, segando momentáneamente a Akira, cuando sus ojos se acostumbraron a la luz repentina y mira al frente su corazón dió un vuelco por el miedo ya que el sabe lo que es, Una gran grada, llena con con los grimorios de Grimm, mirándolo con sus ojos oscuros y moviéndose de un lado al otro sin control, y aunque no tienen boca sus risas podían escucharse
- ¿No me di-
Las palabras de Akira quedaron en su garganta, cuando de repente una gran columna de fuego apareció delante de el, cuando el fuego se extinguido una gran figura emergió con un fénix, con una capa que envuelve todo su cuerpo excepto sus piernas, unos ojos rojos con líneas vertical negras en ellos y dos cuernos en su cabeza, no era nadie más que Grimm
Akira al hacer contacto visual con Grimm, su espalda se lleno de un sudor frío, su corazón latía a un ritmo acelerado y su cerebro trabajaba lo más rápido posible para procesar lo que pasara a continuación
Se miraron durante un par de segundos pero se sintieron como horas, de repente Grimm levanto su mano haciendo callar todo el ruido, lo único que le escuchaba era el fuego ardiendo y si prestan mucha atención el corazón de Akira
Grimm se inclinó levemente para luego enderezarse
Akira al mirarlo, su miedo llegó a un punto más alto que el ni siquiera sabía que se podía llegar
- Mi llama ahora te pertenece -
Si voz era como un susurro ronco, confundido por sus palabras, Akira quería hablar pero fue imposible ya que las llamas se apagaron sumiendo otra vez el mundo en oscuridad, sólo dejándole una llama encima de el, aún sin comprender lo que pasó, sintió una picazón en su pecho izquierda y gradualmente la picazón salto a un dolor leve pero no se quedó hay, siguió escalando volviéndose un gran dolor como si algo lo quemará por dentro, callo al piso retorciéndose de dolor, soltando gritos de agonía, sin previó aviso la flama se extinguió, sumiendo el lugar en la oscuridad total
FIN DEL CAPÍTULO
Buenos días, tardes o noches
Espero que les haya gustado