Jordan se quedó muy sorprendido al oír esto de Jiumo Kasyapa. En ese momento, comprendió por fin por qué los ojos de Victoria parpadearon y le rechazó cuando le pidió ayuda.
El deseo de Victoria de convertirse en una mutante dorada era muy fuerte. Para conseguirlo, era posible que uniera sus fuerzas a las de Mike Baylor. Sin embargo, Jordan seguía sintiéndose triste cuando pensaba en cómo Victoria le había hecho semejante cosa a sus espaldas.
Jordan miró a Jiumo Kasyapa y le dijo:
—Maestro, es usted sabio. La última vez que pude encontrar la manera de enfrentarme a Mike Baylor fue gracias a su guía. Explíquese, por favor. ¿Qué debemos hacer ahora?
Jiumo Kasyapa dijo:
—¿Qué habilidad tengo para salir del aprieto actual? El único que tiene posibilidades de encarrilarlo todo es la Deidad Jordan, pero no la actual Deidad Jordan.