Sin saberlo, era la hora del concierto de la superestrella en Orlando.
Jordan nunca olvidaría ese día de hace dos años. Tyler le había propuesto matrimonio a Hailey en ese concierto y ella había aceptado. En los pocos segundos antes de que aceptara, Jordan había querido dar un paso adelante para detenerla. Estaba muy disgustado.
En ese momento, todavía estaba inmerso en su relación con Hailey.
Después, Jordan subió al escenario y cantó la canción "A Thousand Reasons to Be Sad".
Ahora que lo pensaba, sentía que había sido muy tonto en aquel entonces. Una mujer como Hailey no valía la pena.
Sin embargo, el amor era a veces ciego y obstinado. Las personas que estaban profundamente enamoradas y las que observaban el amor desde fuera tenían estados mentales completamente diferentes.
Uno siempre anhelaba a la mujer que no podía tener, no a la que ya tenía.