Ese día había ido a la universidad, así que no estaba libre para recoger a Pete de la guardería. Fue Melissa quien lo recogió.
Melissa entró en la habitación nerviosa. Tras echar un vistazo al exterior de la habitación, se acercó a Nora, se arregló el vestido y se sentó con elegancia frente a ella. Luego, dijo sin prisa: —Tengo algo que hablar contigo, Nora.
—¿Qué es?
Melissa frunció el ceño y preguntó: —¿Te parece un poco extraño el comportamiento de Cherry últimamente?
Nora: —¿?
Melissa suspiró y dijo: —Cherry solía ser muy animada y una dulce habladora. Jugaba conmigo todo el día y también le encantaba comer. Últimamente, sin embargo, se ha vuelto mucho más callada. Cuando la recogí del colegio y le pregunté qué quería hacer ahora, me dijo que quería hacer jardinería y jugar al ajedrez con la bisabuela. Las dos han estado en el jardín durante una hora y media.
Nora: —...