章節 202: 101.2: Necesito estar solo...
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"Escucha, Xel, tengo algo importante que contarte... No hay forma fácil de decir esto, así que lo diré directamente. Joaquín, capitán de la sección del ejército del distrito Estella, ha muerto."
"¿Qué? No puede ser. Pero si ayer lo vi." digo, negándome a creer las palabras de Lilian que acabo de escuchar.
"Si, lo sé. Murió esta mañana. Nadie se esperaba esto." dice la chica, mirándome con pena. "se que era alguien cercano a ti, y por eso me ha costado tanto el decidirme a venir aquí"
'No comprendo ¿no se suponía que ya había terminado todo? A fin de cuentas, para eso luche contra Garnuk en una lucha que bien podría haberme costado la vida ¿no?'
"¿Como... Como paso?" digo, esforzándome por intentar entender. No puedo pensar con claridad, pero la realidad me golpea como el más pesado de los martillos.
"Pues..." dice Lilian, que parece indecisa sobre cómo proseguir "La cosa es que, pese a que ganamos y tomamos el control de la ciudad, eso no significa que todos los orcos nos acepten sin reservas y..."
"¿Quién fue? Dime quien fue el culpable" pregunto interrumpiendola a mitad de la oración, y de repente una ira terrible estalla en mi pecho.
Noto como Azur me pregunta que pasa al sentir mis emociones a través del vínculo, pero lo ignoro e intento bloquear nuestra conexión. Ahora solo necesito saber quien fue la persona que me arrebato a un ser querido, para devolverle el daño multiplicado por diez.
"No tiene sentido intentar buscar culpables." Dice Lilian, frunciendo el entrecejo al mirarme "Necesitas calmarte. Esto es algo que yo ya sabía que podía pasa...."
"¿TU SABIAS QUE ESTO PASARÍA Y NO LO IMPEDISTE?" digo, saltando sobre el escritorio y agarrando a Lilian por el cuello para alzarla en el aire, mientras los documentos salen volando por el aire a nuestro alrededor "¡DAME UNA RAZÓN PARA NO MATARTE AQUÍ MISMO!"
En cuanto hago esto, la gata de Lilian salta hacía mis brazos, intentando arañarme mientras su cuerpo comienza a crecer en tamaño. Pero, sosteniendo a la chica con mi mano izquierda, uso la derecha para arrancarme a la maldita gata de encima y, tras arrojarla con fuerza contra el suelo, salto del escritorio y destruyo el cuerpo de Yuumi de un pisotón. Ante esto Lilian reacciona con una expresión de enorme sufrimiento, pero no dice nada.
Al mismo momento que hago esto, un pelotón de 10 orcos armados hasta los dientes entra en la sala, atraído por mis gritos.
"¿Pasa algo malo, jefe? ¿Quiere que nos ocupemos de ella?" me pregunta uno de ellos solícitamente.
"¡FUERA!" grito con toda las fuerzas de mis pulmones, y los orcos salen a toda prisa. Mientras sigo sosteniendo a Lilian con una mano, voy a cerrar la puerta de este condenado sitio con llave, tras la salida de los guardias, para que nadie mas venga a molestar.
"E-escuchame... Estas sacando muchas conclusiones apresuradas... y te estas equivocando en todas ellas" dice Lilian en un murmullo, esforzándose por hablar debido a la fuerza de mi agarre, y al dolor que debe de estar soportando por la destrucción del cuerpo de su compañera invocada "por favor, Xelean, no cometas una estupi..."
"¡NO ME LLAMES ESTUPIDO!" digo, mientras una ira irracional burbujea en mi pecho.
"Te llamO *cough* ASí porQUE ESO ES LO QUE ERES EN ESTE MOMENTO, ESTUPIDO" dice Lilian, enfureciendose repentinamente mientras comienza a gritarme con la cara roja de furia "¡SUÉLTAME! Y DEJA QUE TERMINE DE EXPLICARME ANTES DE DECIDIR QUIÉN ES CULPABLE DE QUÉ"
Sorprendida por su arrebato, la suelto y ella cae al suelo de cualquier manera, tosiendo.
Yo la miro resoplando, indeciso sobre qué hacer. Pero el deseo de romper cosas y desquitarme con alguien por el dolor que siento sigue ardiendo con fuerza.
Tras unos instantes, Lilian recupera el aliento y se pone de pie y, mientras se acomoda la ropa arrugada por la caída, comienza a decir "¡Bien! Ahora siéntate en esa silla y termina de escuchar mi maldita explicación. De verdad, eres una de las últimas personas de las que me podía esperar esta clase de cosas"
Ante estas palabras, la culpa y la duda comienzan a ganarle terreno a mi ira, y el cansancio del día vuelve a hacerse presente, por lo que le hago caso a Lilian y me siento detrás de mi escritorio.
Tras verme obedecerla, Lilian se sienta en una silla enfrente mio y comienza a hablar nuevamente "si dije que esto era algo que me esperaba, eso es solo porque esta era una posibilidad que ya habíamos contemplado debido a la situación. Pero nunca podría haber sabido que y cuando iba a pasar... O a quien. Así que, ya vez, eres un estúpido"
"Yo no..." empiezo a decir con el ceño fruncido, molesto por el insulto.
'Nada de esto hubiera ocurrido si ella se hubiese explicado bien desde el principio'
"¡Silencio! No te di permiso para hablar ¿Quieres escuchar lo que amablemente he venido a contarte, o prefieres ir a las calles de una ciudad que no conoces para intentar averiguarlo tu mismo?" dice Lilian con una expresión dura, y la frialdad de su voz me lleva a volver a obedecerla. Cuando ve que yo no intento replicar nada, continúa hablando "Bien. Veo que no eres totalmente un caso perdido... Como iba diciendo hace unos minutos, antes de ser bruscamente interrumpida por alguien a quien consideraba mi amigo, aunque ganamos el control de la ciudad, las relaciones entre nuestras tropas y los habitantes de la ciudad son muy tensas. Hemos estado trabajando arduamente en intentar limar las asperezas entre su perspectiva y la nuestra para intentar que nos acepten, pero es un proceso difícil, y va a llevar mucho tiempo. Además, el caso es que algunas de las personas de nuestras tropas que no eran soldados antes de unirse a la expedición no aceptan muy bien algunas órdenes, y tratan a los orcos como si fueran brutos imbéciles solo porque les parece irracional que hayan cedido su ciudad ante nosotros por una cuestión de tradición y honor." al llegar a esta parte, Lilian hace una pausa y suspira, a la vez que su mirada se ablanda por un momento "Hoy, a las 11 de la mañana, Joaquín murió al intentar detener una batalla que estaba por estallar entre un grupo de soldados orcos y algunas de nuestras tropas que se estaban apuntando mutuamente con armas a distancia. Realmente no sabemos quién empezó ni porque estaban discutiendo. Ni siquiera sabemos si alguno de los dos bandos realmente tenía intenciones de hacer lo que hizo, o solo fue un accidente. Porque la mayoría de los involucrados también murieron, y los pocos que sobrevivieron ahora sólo acusan al bando contrario. El punto es que alguien disparó primero y, tras ese primer disparo, los 10 soldados de nuestras tropas y los 13 orcos empezaron a disparar sin parar masacrandose mutuamente. Joaquín, al estar en el medio intentando detener el conflicto, recibió parte de los proyectiles de ambos bandos. El era un guerrero muy hábil, pero no pudo hacer gran cosa frente a la cantidad de ataques que le impactaron al mismo tiempo de todas direcciónes... Como ves, no hay un culpable realmente, porque nadie quería hacerle daño. El solo fue una víctima accidental de la situación que estamos transitando..." dice Lilian, a la que se le ha ido ablandando la expresión mientras hablaba y vuelve a mirarme con una mirada llena de compasión "Lo cierto es que no debería haberse puesto entre dos grupos armados con armas a distancia de esa manera..."
"Él era así... Siempre haciendo lo correcto, sin importarle las reglas ni a quien tenía que enfrentarse por ello. Esa misma personalidad fue la que lo llevó a rescatarme de un futuro de soledad y pobreza cuando murieron mis padres. Y a llevarme a casa de Ragnar, él padre de Julia, para protegerme de la venganza de tu tío. Aun cuando estaba poniendo en riesgo su vida al hacerlo." digo, rememorando mis primeros momentos con el viejo capitán. Mientras hablo, la tristeza y el dolor me inundan el pecho, a la vez que me derrumbo sobre el escritorio y unas lágrimas comienzan a caer por mi rostro ante la realización de que no volveré a verlo, sin importar lo que haga ni a quien castigue.
"Xel, yo... Lo siento. Ve a descansar e intenta dormir un poco. Tengo entendido que el sueño ayuda en esta clase de situaciones" dice Lilian, que extiende una mano vacilante hacia mí pero decide retirarla antes de llegar a tocarme.
"Si, gracias por avisarme. Y... Perdoname, no debería haber actuado así... ahora, podrías dejarme por favor. Necesito estar solo..." digo entre sollozos, avergonzado por lo que pasó antes, y por el hecho de que Lilian me esté viendo en este estado.
Lilian sale de la habitación sin dejar de mirarme con pena, y unos instantes después siento a Azur, que está esperando detrás de la ventana. Dejo entrar al pequeño dragón negro azulado y voy a acostarme, mientras dejo que el dolor me consuma hasta que la oscuridad onírica del mundo de los sueños lo haga menguar, aunque sea solo durante un tiempo.
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