POV JESSICA
Pude ver como la cara de Santi cambió a una de dolor, y sabía que de haberse enterado antes se iba a poner así, por eso no quería contárselo, ya tenía las suficientes inseguridades como para añadirle más. "¿Es cierto?" susurró "No tengo ni la menor idea. Según él llevábamos años juntos."
"¿Cuántos?" preguntó "Pues no sé, como seis creo recordar." Respondí sinceramente "Eso… Eso no puede ser…" susurró para si mismo "La cosa es que no tengo ni idea de si dice la verdad o no, pero de lo que estoy segura es de que no lo quiero tener cerca." Aseguré "¿Lo quieres?" preguntó "¿Qué? Claro que no." Dije molesta de que esa idea se le cruzase por su mente.
"¿ENTONCES POR QUÉ DICE QUE FUE TU NOVIO? ¿TE DAS CUENTA DE QUE SI LO QUE DICE ES CIERTO ME ESTUVISTE PONIENDO LOS CUERNOS POR DOS AÑOS?" gritó "YO NO HARÍA UNA COSA ASÍ SANTI. ¿DE VERDAD ME CREES CAPAZ DE HACER ESO?" pregunté enfadada "NO ES QUE TE CREA CAPAZ JESSICA, LO QUE PASA ES QUE YO NUNCA FUI SUFICIENTE PARA TI, PERO AL MENOS PODÍAS HABERMELO DICHO EN VEZ DE PONERME LOS CUERNOS." Gritó y yo me congelé.
"Vaya… ahora me doy cuenta que nunca me creíste cuando te digo que te amo." Dije soltando una risa irónica "Eso pudo ser porque te daba pena." Murmuró "Y claro, porque me dabas pena estuve contigo dieciocho años. ¿Sabes qué? Mejor lárgate."
Con eso, se levantó de la silla y se largó, pero no duré mucho tiempo sola, porque Carla entra en la habitación y con cara de preocupación. "¿Se puede saber porque una, Santi se fue como lo hizo, y dos los gritos entre vosotros? Se escuchaban prácticamente en toda la planta." Dijo Carla "Pregúntaselo a él, y ahora hazme el favor de largarte, quiero estar sola."
"No me pienso ir hasta que me cuentes que mierda es lo que ha pasado aquí." Dijo, cruzándose de brazos, pero no quería estar con nadie, y mucho menos hablar de lo que acababa de pasar, porque ya me dolía bastante como para tener que contárselo a alguien más, pero sobre todo quería estar sola, por lo que toqué el timbre y en poco tiempo llega una enfermera.
"¿Necesita algo señorita Leone?" preguntó "Quiero que saque a esta chica de aquí y que no deje entrar a nadie." Dije seriamente "Como quiera, por favor señorita, sígame." Pidió la enfermera amablemente "No puedes estar haciendo esto Jessica." Protestó esta "Lo estoy haciendo."
Y con eso, la enfermera la sacó de la habitación, cerrando la puerta por detrás de ella y es justo en ese momento en el que me echo a llorar, porque me dolía que Santi no creyese que lo amaba y sobre todo que no me dejase ni contarle hasta donde yo sabía.
POV CARLA
No sé qué mierda acababa de pasar. Yo solo sé que en cuanto salí del ascensor escuché como tanto Santi como Jessica estaban gritando, y no mucho después, Santi sale con lágrimas en los ojos, y en cuanto entro a la habitación de Jessica para ver si me entero de lo que ha pasado, y hace que me echen de la habitación. Lo que haya pasado entre estos dos tiene que ser complicado si tenemos en cuenta que Santi no se iría del lado de Jessica así sin más.
En este momento estaba fuera del hospital llamando a Santi, pero no contestaba, lo que me ponía de mal humor y me preocupaba a la vez, porque si algo sé de él, es que después de haber peleado con Jessica, lo más probable es que haga una tontería, y creo que nadie, y mucho menos Jessica por muy peleados que estuviesen, querrían que eso pasase.
"¿Señorita Bastianini?" Me giré para ver quién era el que estaba hablando, porque de ser la prensa, estoy segura de que los mandaría a la mierda, pero resulta ser el médico que vino desde Estados Unidos para ayudar en el caso de Jessica. "¿Necesita algo?"
"¿Usted sabe algo de lo que ha pasado en la habitación de Jessica?" preguntó el doctor "No sé nada, en cuanto entré a preguntar me echó prácticamente, y para colmo el estúpido de su prometido no contesta el puñetero teléfono." Dije frustrada "Por eso no quería que el chico estuviese en la habitación…" murmuró el señor.
"¿De qué habla?" pregunté, apartando el teléfono de la oreja "Esta mañana me enteré de que Lucas había llegado a Italia, y que estaba buscando a Jessica para llevársela con él a Estados Unidos de nuevo…" empezó, pero lo detuve antes de que pudiese seguir "Espere, espere, espere… ¿Cómo llevársela a Estados Unidos? ¿Y quién coño es Lucas?"
"Apareció hace un par de años en la vida de Jessica diciendo que él era su novio, y evidentemente, ella no recordaba nada…" apuntó "¿Me está diciendo que Jessica tuvo novio y este vino a buscarla?" pregunté sin creerme lo que estaba pasando "Nunca tuvo novio. A mí me dijo que había algo que no le gustaba de ese chico, y en cuanto ella le dijo que no, la acosaba. Hasta fuimos a la policía y nos cambiamos de barrio. Lo hicimos creer que nos habíamos ido a otro estado."
"¿Y qué pasa con que Santi lo sepa?" pregunté confundida "Que no creo que fuese a reaccionar muy bien." Respondió "Si no escuchó a Jessica pues seguramente no. Y como no lo haya hecho es que va a saber lo que soy enfadada." Dije seriamente "Pues suerte con que te lo cuente, porque ya te digo que Jessica no te lo va a contar."
"Lo sé, espero encontrarlo. Me llamas si pasa cualquier cosa con Jess, en este mismo momento está enfadada y no va a dejar a entrar a nadie a la habitación." Dije sabiendo bien como era el temperamento de mi mejor amiga "No te preocupes, te llamaré si algo pasa."
"Gracias." Agradecí con una pequeña sonrisa en mi rostro y con eso salí del recinto del hospital y empecé a buscar a Santi para ver qué mierda era lo que había pasado y esperar que Jessica no esté demasiado enfadada cuando vuelva.
Una semana más tarde
Había pasado una semana desde la discusión de Santi y Jessica, y esta no había dejado entrar en la habitación a nadie que no fuese médico o enfermero, y al parecer no había hablado. Santi era otra cosa igual. Estuve buscándolo por días y llamándolo constantemente para saber dónde estaba, pero no había ni rastro de él.
Hoy era el día en el que Jessica saldría del hospital, y esta vez sí que no iba a poder ignorarnos como lo había estado haciendo todo este tiempo. Ahora era mi momento para aprovechar y enterarme que es lo que había pasado entre los dos, porque si algo tenía más que claro, es que no iba a dejar que se separasen por una discusión que estoy segura de que es demasiado estúpida.
"Carla, toma las cosas de Jessica. Si ves que Jessica se encuentra mal o notas cualquier cosa extraña, me llamas inmediatamente." Informó "Lo haré, gracias Eric." Agradecí "De nada. ¿Sabes algo de tu amigo?" preguntó y negué "No aparece, y te juro que me estoy empezando a enfadar en serio. Y Jess, ¿te ha dicho algo?"
"Me preguntó un par de veces por él, pero en cuanto le digo que no sé nada de él, se cierra y no habla más." Confesó "En cuanto lo encuentre lo mato, en serio." Justo en ese momento sale Jessica con un par de cosas en la mano y pasa por mi lado sin decir nada, saliendo del hospital. Me despido rápidamente de Eric y la sigo.
Cuando la veo apoyada en la puerta del coche, lo abro, meto sus cosas en el maletero, subí al coche y durante gran parte del camino a la casa todo fue silencioso hasta que decidió hablar. "¿Sabes algo de Santi?" susurró y negué "No. Ni siquiera sé en donde coño se metió, y déjame decirte que pienso matar a tu prometido. Ahora, ¿me puedes explicar qué es lo que ha pasado para que se fuese así? Santi no te dejaría de no ser algo serio."
"¿Podemos hablar de esto en otro momento?" pidió "Vale, pero será hoy después de que los niños se vayan a dormir y tu familia se vaya." Dije seriamente "Como quieras." Y con eso sí, el resto del camino lo hicimos en silencio. Podía notar que no estaba bien, pero no por lo de la operación ni nada de eso, si no que estoy segura de que era por no saber nada de Santi. Era la primera vez en todo el tiempo que llevan juntos que parece así de malo, y de verdad, tenía planeado acabar con Santi por lo que estaba haciendo, porque si de algo estoy más que segura es que él también lo estaba pasando mal.
Cuando llegamos a la casa, Jessica cambió su cara a una más contenta, o al menos ese era su intento, porque se podía ver desde kilómetros, y en cuanto Sofía la viese, echaría humo.
Estuvimos como una hora hasta que Jessica dijo que estaba cansada y que se iría a descansar un rato. Esto se tenía que acabar, y ya. No iba a permitir que por culpa de un mal entendido, corriésemos el riesgo de perder de nuevo a Jessica. "¿Se puede saber dónde está Santi y por qué mi hermana no está bien?" preguntó Sofía, intentando contener su enfado "No tengo ni la menor idea de donde está Santi, pero te aseguro que en cuanto lo encuentre, lo mato con mis propias manos si es necesario."
"¿Cómo no sabes dónde está?" preguntó calmándose de repente "No tengo ni idea, tuvieron un mal entendido, se enfadaron y se largó sin decir a donde." Dije enfadada con la situación "¿Cuánto hace que no sabes de él?" preguntó Sofía tranquilamente "Habrá una semana." Confesé "¿Le pudo haber pasado algo?"
"Espero que no, porque entonces no tengo ni la menor idea de cómo pueda reaccionar Jessica en caso de que le haya pasado algo." Dije sinceramente "¿Lo has llamado?" preguntó y le enseñé el historial de llamadas "Eso es lo que he estado haciendo todos estos días, pero no hay manera de que conteste al teléfono."
"¿Y si denunciamos su desaparición?" preguntó "No creo que esté desaparecido, pero lo haremos en caso de que no aparezca mañana." Aseguré "Bueno, nosotros nos vamos a casa. ¿Estás segura que no quieres que nos quedemos alguno de nosotros para ayudarte a cuidarla?" preguntó suavemente "No, pero os pediría el favor de si os podéis llevar a los niños con vosotros, quiero ver si descubro que es lo que ha pasado, y no creo que con ellos alrededor pueda."
"Está bien, nos llamas si necesitas algo ¿vale?" pidió y asentí. Les di un abrazo a todos, me aseguré de decirle a los chicos que se portasen bien y cuando salieron por la puerta, subí a la planta de arriba para asegurarme de que Jessica estuviese bien. Cuando la vi dormida, cerré la puerta con cuidado y bajé a la sala, me senté en el sofá llamando a Santi y pensar en donde mierda podía estar.
Después de un par de horas, escuché un ruido que venía de la planta de arriba, por lo que rápidamente subí para asegurarme de que no le pasó nada a Jessica. Cuando entro a la habitación, la veo sentada en la cama llorando y en la otra punta de la habitación el móvil con la pantalla rota. Estoy casi segura de que tendría que comprarse uno nuevo. Me acerqué a ella, me senté en la cama y la abracé durante un rato para que se calmase un poco y ver si podía contarme que es lo que mierda había pasado entre los dos.
"¿Qué pasa? ¿Te duele la cabeza? ¿Necesitas una pastilla o que llame a Eric?" pregunté, preocupada por la salud de mi mejor amiga. Negó y la estuve abrazando y pasando la mano por su brazo durante un rato más, hasta que decidió apartarse de mí y limpiarse las lágrimas. "¿Dónde están los chicos?"
"No te preocupes por ellos, se fueron con tus padres." Informé "¿Por qué?" cuestionó "Porque necesito entender que es lo que ha pasado en el hospital para que Santi no aparezca y tú estés cómo estás en este mismo momento." Dije tranquilamente "Lucas… Eso es lo que ha pasado."
"No entiendo Jess, y me gustaría hacerlo." Pedí "Básicamente Eric entró diciéndome que teníamos que hablar de algo importante y que era mejor que Santi saliese… No quise, al final Santi lo sabe todo de mí… y cuando le dije que según ese tipo era su novia por seis años se puso a gritar…"
"¿Te dejó explicarle eso?" pregunté, no chistándome la imagen que estaba pintando Jess "No, empezó a decir que si eso era cierto llevaba poniéndole los cuernos dos años… que hubiese sido mejor que lo dejase en vez de que se los pusiese… Nunca haría una cosa así Carla, yo lo amo…" aseguró Jess con lágrimas en los ojos "Sé que no lo harías, pero ¿Por qué me da la sensación de que no es eso lo que te molesta?"
"Porque nunca creyó que yo lo amo… Piensa que estuve con él por pena…" susurró lo último "¿Y estarías dieciocho años? Eso no tiene sentido." Murmuré la última parte "Eso mismo se lo dije yo, pero no me cree." Contestó "Es que yo lo mato, de verdad te lo digo." Murmuré enfadada "Déjalo, pero ¿podemos ir a buscarlo?"
"No tengo ni la menor idea de donde puede estar. ¿Acaso a ti se te ocurre algún lugar?" pregunté, esperanzada de encontrarlo "Un par…" susurró "Pues dímelos y voy a buscarlo." Dije, levantándome de la cama "Voy a ir yo." Dijo seriamente mi mejor amiga "Tú tienes que descansar Jess, te operaron hace un par de semanas y Eric dijo…" empecé, pero ella negó "Me da exactamente lo que dijo Eric... Yo solo quiero asegurarme de que Santi está bien."
"Si no piensas en ti, piensa en vuestro hijo." Intenté "Carla, no me vas a cambiar la idea. Si quieres venir, bien, no pienso detenerte, pero también sé ir sola." Respondió "No voy a dejar que vayas sola, pero pienso que deberías descansar." Insistí "No lo voy a hacer." Aseguró "Está bien, déjame llamar a Jackson y a un par de guardaespaldas para que vengan con nosotras."
"No tenemos tiempo." Dijo "Claro que lo tenemos. Tú misma dijiste que debíamos andar todos con ellos, y esta no va a ser menos." Respondí "Pues que se den prisa, porque realmente no tengo tiempo… tengo un mal presentimiento." Murmuró la última parte "Ya verás que va a estar bien, no te preocupes. No os hace nada bien a ninguno de los dos. Lo vamos a encontrar, ya verás."
Con eso salí de la habitación, porque estoy segura de que, de no encontrar a Jackson en el próximo par de minutos, se iría por su cuenta, y no quería tener que estar buscando a los dos. "Jackson, al fin te encuentro." Dije aliviada "¿Qué pasa? ¿Me necesitas para algo?" preguntó, frunciendo el ceño "Necesito que prepares el coche y cojas a un par de guardaespaldas más con nosotros."
"¿Qué vamos a hacer? ¿En serio estás pensando en dejar a Jessica sola en casa?" preguntó sorprendido "No la voy a dejar sola… Eh Jessica, espera por nosotros… Vamos antes de que tenga que buscar a otra persona más." Jackson llamó a un par de guardaespaldas más y salimos por la puerta corriendo antes de que Jessica decidiese que era mejor irse por su cuenta.
Durante el camino todo fue en silencio. Se notaba la tensión por todos lados, y para colmo, Jessica no había dejado conducir a Jackson, a veces odio su terquedad, de verdad lo digo. Fuimos a un par de sitios, pero no había ni rastro de Santi, y podía notar como cada minuto que pasaba, Jessica se preocupaba más, cosa que no debería estar pasando.
Después de un par de minutos, el camino se me hizo conocido, y no es hasta que nos paramos que me doy cuenta de que estamos en frente del cementerio, lo que no entiendo que es que hacíamos aquí. "¿Podéis esperar aquí un rato?" preguntó Jess "Nosotros vamos contigo, Jess."
"Por favor…" susurró y yo suspiré "Está bien." Pude ver la cara de Jackson y que no le gustaba para nada la idea, pero le iba a dejar hacer esto, al menos que se lo pensase. Una vez Jessica se bajó del coche, Jackson se gira en mi dirección. "¿Se puede saber por qué la dejamos ir sola?" preguntó sin creérselo "Eso es lo que va a pensar ella… mejor salgamos antes de perderla."
Con eso salimos del coche y seguimos a Jessica a una distancia prudente para que no se diese cuenta de que la estábamos siguiendo. La verdad no sé ni como sabía dónde quedaban todos esos lugares, ni por qué nos estábamos dirigiendo a donde estaba su tumba, pero sobre todo, como sabía dónde quedaba su tumba.
Cuando estábamos por doblar la última esquina para llegar a donde era la tumba de Jessica, escuchamos un grito que nos hace correr en la dirección en la que vino, porque ambos sabemos que fue Jessica.
Nada más llegar junto a Jessica, vemos a Santi tirado en el suelo y con heridas varias. Al parecer lleva bastante tiempo así y aquí, me agacho al lado de Jessica para intentar separarla de él, pero no hay manera, por lo que me rindo mientras Jackson habla con los servicios de emergencia. Esto no podía estar pasando… Jessica no podía estar perdiendo al amor de su vida de nuevo… Esto es una mierda, y bien grande.