El temperamento de Song Enya era volátil. Y estuvo a punto de explotar hasta que vio la cara de la persona cuando ésta levantó la cabeza. ¡Era Yun Shishi! Después de la conmoción, sospechas surgieron en su cara.
Sin duda, reconoció a esa mujer con sola una mirada.
Ese día, en la pantalla del celular de Mu Yazhe, mostraba la cara dormida de esa mujer.
Su impresionante belleza era totalmente natural, a diferencia de aquellas actrices que pasaban por el bisturí. Y tanto su apariencia como su actitud eran muy distintivas.
A pesar de haber visto la foto de ella una sola vez, no podía olvidarla.
La única diferencia era que la mujer frente a ella llevaba encima un elegante vestido negro y un maquillaje ligero y sofisticado en su rostro. Su cara era un poco más llamativa que la de la foto.
Era mucho más atractiva en persona.
Era un hecho que ella no quería admitir.