章節 696: Extra 17: To Love Ruto (39)
El tiempo avanzó rápidamente, y solo faltaban unos pocos días para que las vacaciones terminaran.
Kurama estaba esperando en la entrada de su casa junto a Ryoko Mikado y Tearju, quien parecía haber cambiado mucho durante estos últimos meses. Ella ahora era mucho más abierta con sus deseos, dejando a un lado la típica timidez por una actitud mucho más coqueta y firme.
Momo y Nana estaban junto a Lala, quien estaba sonriendo porque había recibido el mensaje de su padre que pronto irían a la tierra.
Las dos gemelas no estaban muy felices con la idea de ver a su padre porque a pesar de que tenían permiso, sabían que su padre las iba a castigar por ignorar sus deseos.
"¡Ahí vienen!" - exclamó Lala con emoción cuando vio como la nave de su padre estaba volando en su dirección.
Kurama levantó una ceja porque Gid no estaba usando el modo de camuflaje para su nave, lo que podría causar una enorme conmoción en la Tierra.
El hombre de cabello blanco rápidamente hizo un movimiento de mano discreto mientras veían como la nave espacial se posaba sobre su hogar, para que luego de unos segundos, Naruto apareciera junto a Yami y Gid.
"¡Naruto!" - exclamó Lala mientras saltaba donde su prometido.
Naruto le dio una amable sonrisa mientras le devolvía el abrazo - "Te extrañé, Lala"
"Yo también, Naruto ~" - respondió Lala con lágrimas en los ojos porque podía ver la enorme cicatriz que el joven de cabello rojo tenía en su mejilla. Ella lentamente movió sus dedos a la cicatriz, para luego mirar a su padre con enojo.
"No me mires a mí, yo no fui el responsable" - respondió Gid mientras le daba una mirada en blanco - "Él ganó esa cicatriz salvando a uno de sus subordinados"
"Un sacrificio noble" - agregó una voz femenina que irradiaba seducción.
Tearju y Ryoko rápidamente comprendieron de quién se trataba, así que rápidamente se pusieron a la defensiva porque no sabían qué tipo de reacción tendría Kurama cuando viera a la dueña de esa voz.
"¡¿Mamá?!" - exclamaron las chicas de cabello rosado mientras veían como una silueta familiar aparecía al lado de Gid, quién todavía conservaba su forma infantil.
"Hola, hijas" - dijo una hermosa mujer de cabello rosado.
Kurama no podía ver bien su rostro gracias al velo que lo cubría, pero todo el resto de su cuerpo demostraba la belleza de la mujer. Ella estaba usando una túnica blanca que no cubría sus hombros y mostraba gran parte de su escote junto a un bastón que terminaba en un corazón.
"Mamá, ¿Qué haces aquí?" - preguntó Lala con sorpresa.
"Solo vine a ver a mi futuro yerno" - respondió Sephie Michaela Deviluke, la emperatriz del imperio Devilukiano - "Así como controlar un poco a mi esposo"
Gid chasqueó la lengua mientras le lanzaba una mirada molesta a su esposa.
Ryoko Mikado y Tearju sintieron un poco divertido que la única persona que parecía poder controlar al Gid, no fuera otra que su esposa.
Sephie sonrió ligeramente bajo su velo, aunque su expresión cambió a una de sorpresa cuando vio al apuesto hombre de cabello blanco - "Oh, ya veo por qué te confundieron con un Charmiano, tu apariencia es digna del título, aunque no eres de nuestra raza"
"Es un placer, mi nombre es Kurama Uzumaki, o también puedes llamarme Kurama Otsutsuki" - respondió Kurama con calma.
Tearju abrió los ojos, sorprendida por el nombre del hombre con quién se había estado acostando, después de todo, ella no sabía que él era de una raza catastrófica originaria del otro lado del universo, una raza que todas sus historias registradas eran sobre peleas titánicas donde causaban desastre a todo lugar que iban. Aunque en retrospectiva, Kurama no parecía una persona violenta y deseosa de la destrucción de otros planetas, de hecho, él parecía actuar como un terrícola común y corriente.
Sephie frunció el ceño cuando escuchó el apellido de Kurama porque su cultura también tenía escritos antiguos de la raza Otsutsuki, aunque rápidamente se calmó cuando notó como Gid estaba tranquilo - "Ya veo, es un placer conocerte, Kurama Uzumaki, mi nombre es Sephie Michaela Deviluke, la esposa de este idiota y la madre de estas tres princesas que te han causado tantos problemas"
"Oh, no te preocupes, no son un problema, de hecho, nuestras vidas son mucho más animadas gracias a ellas" - respondió Kurama con una feliz sonrisa paternal mientras caminaba donde Lala y acariciaba su cabello - "Honestamente, he empezado a considerar a Lala como mi propia hija, y si el idiota de mi hijo no se casa con ella, o la deja escapar, entonces voy a darle la paliza de su vida"
Sephie sonrió ligeramente mientras veía como Naruto le daba una mirada en blanco, y Lala sonreía felizmente - "Es bueno escucharlo, gracias por querer tanto a nuestra hija, ¿Verdad Gid?"
"Lo que sea" - murmuró Gid con una actitud gruñona - "Como sea, tu hijo logró lo que le pedí que hiciera, así que no tengo quejas con que se convierta en mi heredero, ¿Eso te ocasiona algún inconveniente?"
"En lo más mínimo" - respondió Kurama con calma.
"Bien, entonces solo queda organizar la boda y todo estará listo, eso voy a dejárselo a ustedes porque si soy honesto, no soy alguien con la paciencia suficiente para realizar los preparativos para la boda" - dijo Gid mientras le daba una mirada a su esposa y asentía ligeramente antes de volver a la nave.
"Ese idiota" - murmuró Sephie mientras negaba con la cabeza, para luego mirar al apuesto hombre de cabello blanco - "Solo tienes que decirme cuando quieres organizar la boda, aunque si soy honesta, me gustaría que fuera lo antes posible, después de todo, quiero ver nietos"
"Oh, pienso lo mismo" - respondió Kurama mientras sus ojos brillaban con diversión.
Naruto se sonrojó por la vergüenza mientras que Lala sonrió de felicidad, después de todo, ¿Qué chica no desearía tener una familia con el chico que tanto amaba? Sin contar que Naruto era todo lo que ella soñó en un esposo.
"Es bueno que estemos en la misma página, Kurama-dono" - dijo Sephie mientras asentía con calma y aunque no lo dijera, tenía que admitir que estaba sorprendida por la enorme fortaleza mental que el padre de su yerno tenía, después de todo, cualquier hombre intentaría quitarle su velo luego de verla por unos pocos segundos.
"Exacto" - asintió Kurama mientras extendía su mano - "Es un placer que organicemos esto juntos, aunque me gustaría que más personas se unieran a esto"
"¿Oh?" - Sephie miró detenidamente la mano de Kurama antes de devolverle el apretón, solo para sentir lo pacífica que era el aura del extraño hombre de cabello blanco.
Kurama levantó una ceja antes de sacudir la cabeza - "En fin, pueden quedarse con nosotros si así lo desean"
"Oh, no te preocupes, no queremos imponer más de la cuenta, además, nuestra nave tiene nuestras habitaciones ya preparadas" - respondió Sephie con una sonrisa.
"Entiendo" - asintió Kurama mientras no entraba más en el tema, para luego mirar a su hijo y notar lo mucho que había madurado durante estos pocos meses. Él podía sentir como Naruto era un hombre ahora, no porque había perdido la virginidad o una razón así de estúpida, sino porque podía notar la fuerte convicción, así como el deseo de salir adelante a pesar de la adversidad.
Kurama no sabía qué era lo que había sucedido en ese planeta, así que luego se lo preguntaría a Yami, oh, y hablando de ella...
El hombre de cabello blanco miró en dirección y notó como la chica estaba mirando a Tearju con un rostro confundido.
Tearju la estaba mirando con lágrimas en los ojos, pero algo parecía estar impidiendo que ella fuera donde su hija, así que Kurama rápidamente le dio el empujón que necesitaba.
"¡Kya!" - Tearju soltó un grito de sorpresa mientras se movía hacia donde estaba su hija, quien rápidamente la atrapó instintivamente - "Etto... Hola..."
". . ." - Yami le dio una mirada en blanco mientras sentía como algo dentro de ella temblaba.
"Sé que han pasado muchas cosas, pero me gustaría hablar contigo sobre algo importante" - dijo Tearju con lágrimas en los ojos.
Yami soltó un suspiro antes de asentir.
Ver así de triste y emocionada a su madre, le hizo comprender que no importaba lo mucho que ella intentara reprimir sus emociones, estas seguían viviendo en su interior, esperando el momento listo para poder resurgir.
"Ok, vamos, hay algo que quiero preguntarte" - dijo Yami mientras las dos rubias caminaban fuera del lugar.
Sephie miró con curiosidad esta interacción antes de concentrarse en sus hijas y darles una sonrisa - "Nana, Momo, hay algunas cosas que me gustaría hablar con ustedes..."
"¡H-Hai!" - exclamaron las gemelas con sudor corriendo por sus frentes, después de todo, la persona más peligrosa de la galaxia no era su padre, sino más bien su madre, o al menos así era desde sus puntos de vista.
"Lala, deja a tu prometido hablar con su padre, estoy seguro de que él necesita un poco de tiempo para poder expresar todo lo que hay dentro de él" - dijo Sephie mientras miraba a su hija mayor.
"Pero..." - murmuró Lala con el ceño fruncido.
"Ve a hablar con tu madre, yo no escaparé" - dijo Naruto con una sonrisa - "Además, no la has visto en mucho más tiempo que a mí"
"Ok" - murmuró Lala antes de darle un pequeño beso en los labios y correr donde su madre.
Naruto se quedó congelado mientras sentía como sus mejillas se sonrojaban por ese ataque sorpresa.
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[Origen] Cap 658 <--- Disponible en Pa treon.
[La Leyenda del Kyubi: Vol 4] Extra 18(4) <--- Disponible en Pa treon.