*Mature content but not explicit*
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Elena se encontró con una parte desconocida para ella, su respiración entre cortada se mezclaba con el sonido de los besos cada vez mas apasionados de ambos, las manos de ambos exploraban todo lo que antes no habían hecho. Es cierto que no era la primera vez, en sus relaciones anteriores ya habían hecho todo lo que las parejas hacen, sin embargo, era la primera vez que traspasarían ese límite de amistad. Por un momento esta idea genero duda en Elena que se detuvo en seco y aparto ligeramente a Carlos por los hombros para mirarlo fijamente a los ojos. Este movimiento súbito genero confusión en Carlos quien entre abrió los ojos para ver que sucedía. Su respiración era agitada y sus mejillas estaban sonrosadas. Encontró en la mirada de Elena algo de duda y por un momento no supo como reaccionar hasta que finalmente le preguntó con su voz ligeramente rasposa y de forma suave:
- ¿quieres que me detenga?... No hay presión, sabes que te amo Elena... solo a ti.
La abrazo y poso su frente en la frente de ella, tratando de calmar su respiración y bajar la temperatura de su deseo. Este gesto sirvio de encendedor para Elena, ¿quien pensaría que el simple gesto de respeto provocaría el aumento del deseo en una mujer?
- Te deseo Carlos - mientras hablaba, abrazo por la cintura a su novio y lo comenzó a besar ligeramente por todo el rostro, labios, mejillas, barbilla...- en verdad deseo estar contigo hoy y ser uno solo, te amo.
Esta expresión provocó en Carlos un gran cambio y soltó todas las cadenas que lo detenían. Desde hacia mucho tiempo que amaba a Elena, su cabello, su aroma, la suavidad de su piel, su carácter fuerte y dulce, su sonrisa, sus labios...
-¡Rayos Elena!, te deseo tanto - mordió ligeramente su labio inferior, mientras la cargo por la cadera y la llevo a la cama sin dejar un momento de besarla, sentía que explotaría si no la besaba, sino sentía el calor de su piel en contacto con la suya, desabotonando su blusa y ella su cinturón.
Finalmente el volcán erupcionó entre ambos, el deseo, la pasión y la experiencia hizo extremadamente placentera esta primera vez. No sólo sus cuerpos se unieron, sino también sus almas y su corazón de una forma que jamas habían experimentado. Por suerte las paredes de la habitación eran de seguridad, a prueba de balas, fuego y ruido, sino toda la estación se hubiera enterado de lo que ocurría en ese momento.
Mientras tanto en otro espacio del bunker, el escuadrón Águila Azul estaba preparando el equipo para la misión que se realizaría en tres días. En la sala de control de Medusa, Benedek hablaba con la líder de la misión, Eikadrin, una ex-seal de la marina norteamericana que llevaría a cabo la misión de rescate de los gemelos.
- Eika, los brazaletes fueron detectados en la zona del congo, donde se sospecha que hay una ciudad oculta, el sistema de auto destrucción se activo pues trataron de abrirlos. No es seguro que se encuentren ahí pero Elena cree que no perdemos nada en intentar. Los nanobots llegaran tres horas antes que ustedes y se conectarán al equipo de rastreo, programe tres satélites ghost para que monitoreen la zona y tengas una visión 3D del lugar. Si es una trampa lo sabrás antes y así nadie estará en peligro de nuevo, no importa que ahí estén Ferrau y Claude, la misión se abortara, ¿entendiste?
- Pero Beni, si tenemos todo este equipo ¿porqué no podríamos rescatarlos?
- El grupo que enfrentamos tiene tecnología que puede deshabilitar nuestros equipos de rastreo, quizás hasta detectar a los nanobots, pero aun no lo sabemos, aunque todo estuvo bajo secrecía y encriptado, pudo haber un topo.
-¿Un topo? ¿y porque no lo hemos descubierto? ¿No crees que es peligroso trabajar con un topo dentro del búnker?
- Tu sabes como es esto Eika, no estamos seguros, es por ello que no debes arriesgarte, ¿Entendido?
- Si Beni, entendido.
Eikadrin era una mujer practica y extremadamente buena en las múltiples misiones, no había fallado ninguna y su porcentaje de perdida de tropas era menor del 10%. Sin embargo, por ello, la asociación terrorista encontró a su familia y la mató mientras ella desmantelaba una base de ellos. Desde entonces juro venganza y renuncio a las fuerzas especiales para unirse al programa Medusa. Nadie pensaría a primera vista que tuviera tales características pues su estatura era relativamente baja a la mayoría, 1.67m, descendiente de padre hindú y madre checa, había sido enfermiza toda su infancia hasta que empezó a entrenar y se unió al ejercito. Su belleza era incomparable con todas las que conformaban el grupo, ojos negros con hermosas pestañas largas y onduladas, cabello negro largo hasta media espalda, cuerpo musculoso natural y mirada asesina. Su habilidad como francotirador también era de envidiar, la segunda a nivel mundial. Eikadrin era mortal.
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