"Las gaviotas gimen ante la tempestad - gimen y corren por encima del mar, y en su fondo están listos para ocultar su miedo a la tormenta.
Como una llama azul, rebaños de nubes resplandecen sobre el abismo del mar. El mar atrapa rayos que los ahogan bajo sus aguas. Al igual que las serpientes hechas de fuego, tejen en el agua, desvaneciendose, los reflejos de este rayo".
Estas palabras podrían ser usadas para describir la visión que tienen delante.
—El mal tiempo. Hoy no es un buen día para viajar... —un hombre joven pequeño con el cabello siendo soplado por el viento y estando desordenado estaba parado en el borde de un barco espiritual de tamaño medio y miraba hacia fuera del barco con los ojos entrecerrados.
Todo el mundo podía ver la melancolía en su rostro.