Narra Lavinia.
Pi pi pi pi pi
En ese momento es cuando suena mi queridísima alarma y me despierta de mi sueño maravilloso, espero que entendáis el sarcasmo porque mi despertador ha acabado destrozado en el suelo.
Me levanto con toda la pereza del mundo ya que es un día un poquitín ajetreado para mi. Y todos os preguntaréis ¿por qué ajetreado?, puesssss porque después de la eternidad que me ha costado convencer a mis padres ¡¡POR FIN!! me dejaran ir a la universidad, aunque con muchas o demasiadas condiciones. Pero la condición más importante es que nadie sepa lo que soy en realidad.
Todos os preguntareis quien soy en realidad pues esa es una buenísima pregunta, porque se puede decir que somos los seres más raros que puedan existir. La mayoría de personas nos dicen híbridos, pero la verdad somos muy pero que muy diferentes a ellos. Se puede decir que soy un tipo de diosa, pero diferente a las demás.
Uy pero qué despiste ni me he presentado, encantada soy Lavinia Sangenís y soy una inmortal de las más poderosas del mundo.Soy la pequeñaja de la familia aunque tenga 22 años soy la enana que nacio ultima y vino de SORPRESA para mis padres. Mientras mis hermanos ya tienen algún siglo yo soy la super jovencita, pero la más poderosa de los tres hermanos de sorpresa para todos, yo al fin y alcabo e aprendido a sobrellevar las cosas.
Me introduzco en el baño, cojo mi móvil para conectarlo al altavoz y empiezo a buscar una canción con ritmo para que mi mañana empiece con buen pie. La encuentro y le doy a reproducir, muevo mis caderas al son de la música mientras me voy desnudando para meterme en la ducha. Canto esa canción mientras me enjabono y siento en mi como las gotas de agua lavan mi cuerpo.
Porque la gatica tiene dueño
A que se sube en el tejado yo le enseño.
Ella e'arisca, me ronronea
Se hace la uña y en la disco me gatea, yah-yah.
Salgo de la ducha y decido ponerme algo normal ni muy provocativa ni muy monja entre medias, ya que me tengo que pasar por una humana debo elegir bien, aunque mis gustos que digamos no son malos pero se cuando quiero provocar y cuando no.
Elijo un conjunto de ropa interior de encaje negro y rojo, unos pantalones cortos de cintura alta negros, un top blanco de manga corta con escote de barco y mis amadas zapatillas fila, las amo lo reconozco cuando las vi en el escaparate de esa tienda me llamaban como si fuera hipnotizada, aunque diciendo la verdad creo que todo lo que tengo me llama jajaja.
Me pongo enfrente del tocador, me pelo mi pelo largo y rizado en las puntas, me pongo un pañuelo negro haciendo un lazo en la cabeza en modo de diadema. Me maquilla algo natural no muy exagerado ya que siendo sincera nunca me gusta llamar la tención ya me sobra con mi pueblo para capturar miradas de otras personas y la verdad no tengo ganas de ser muy reconocida por otros.
-¡¡¡¡LAVINIA QUIERES BAJAR YA, A ESTE PASO NO LLEGAS A LA UNIVERSIDAD!!!!
Ese señoras y señores es mi adorable, maravilloso y sobreprotector hermano Adria Sangenís, mi hermano mayor. Hay donde lo veis parece que tiene 25 años recién cumplidos pero nooooo tiene 2 siglos el muchachote asique cuando quiero meterme con él le digo vejestorio ya que no lo soporta.
-¡¡¡YA VOY!!!- Giro los ojos con todo el estrés del mundo ya que me falta una hora.
Cojo mi mochila, meto mi mac, mis libros, teléfono, dinero del mundo de los humanos y estuche y un archivador por sí debo hacer apuntes. Salgo de mi gigantesco cuarto, bajó las escaleras corriendo y entro a la enorme cocina de mi casa, para mi es una casa para otros sería una mansión. Voy ha ser sincera soy una persona bastante simple que si viviera en una casita con una habitación, cocina y salon sería la persona mas feliz del universo.
-Hola familia, ya llego la alegria de la casa- Digo con todo el entusiasmo del mundo.
Adoro a mi familia, aunque somos algo diferentes, nos gusta ser felices con nuestras imperfecciones.
-Hola cariño siéntate a desayunar o sino se enfriara la comida.- Me dice mi madre con una sonrisa adorable.
Me siento al lado de mi hermana Danae y a mi otro lado esta mi padre Dorian, enfrente mio estan sentados mi hermano y mis cuñados Septune mujer de Adriá y Kendall marido de mi hermana. Mi madre Velia está ayudando a nuestra nana a organizar la cocina. En esta familia siempre comemos y compartimos juntos todo, ya que hoy por hoy mis hermanos tienen sus respectivas casas con sus almas gemelas.
Observo a mis padres como se miran fijamente con amor igual que mis hermanos y sus respectivas parejas, ojala yo encontrara el amor como lo encontraron ellos, esa pareja destina a ti para toda la eternidad. Empiezo a comer, mientras pienso en mi ser indicado, normalmente son ellos quien nos reclaman a nosotros ya que a diferencia de otros seres sobrenaturales podemos estar con aquellos que no son nuestra pareja destinada y enamorarnos.
Miro a mis padres por un momento para hacerles aquella pregunta que llevo toda la semana pensando después de darles mi razonamiento y problema de ir y volver de cada mundo.
-Papis, habéis pensado en lo que os dije de mudarme al mundo humano para que no tenga que estar de un lado a otro y intentando esconderme para no captar la atención. Sería una ventaja para mi el hecho de vivir sola o con las chicas durante el tiempo en la universidad.
-No estoy muy convencido- dice mi padre- tienes deberes aquí con tu pueblo como vas hacer.
Hay no os había comentado, en mi "pueblo" que en verdad es como una ciudad, somos los soberanos, donde protegemos a los nuestros y solucionamos cualquier problema que se plante. Resulta que soy la sucesora al trono ya que ni mi hermana, ni mi hermano quieren ser herederos y me lo encasquetan ami. Sinceramente esta familia no va atras del poder, porque más que pelearnos por el nos lo intentamos encasquetar unos a otros. Aunque la verdad no me avergüenzo de ser la futura soberana de mi reino, ya que me siento sinceramente afortunada de serlo. Quiero ser como mis padres ya que ellos fueron los mejores, llevan más de una eternidad reinando.
Mi pueblo es diferente al resto escondido de seres sobrenaturales y de humanos, se puede decir que nadie sabe de nuestra existencia. Nos ocultamos por la avaricia de esas personas que querían nuestros ricos territorios y poder donde no lo podían encontrar. Somos seres poderosos donde con la punta del dedo meñique podría decapitar a cualquier ser, pero también somos pacíficos antes de empezar una guerra. Desde los hombres lobos, hasta hadas y sirenas, si descubrieran de nuestra existencia deben respetarnos ya que somos seres supremos de donde cuentan las leyendas en sus lugares.
Mis padres se puede decir que son los padres de los seres sobrenaturales ya que después de la gran guerra son los únicos que sobrevivieron por el amor que se proclamaban el uno al otro. Después de eso nos tuvieron a nosotros tres, tuvimos todos una infancia de amor, pero a la misma vez de enseñanza.
-Cariño nuestra hija tiene razón, deberíamos dejarla ir, que conozca y aprenda nuevas experiencias, no puedes ser tan sobreprotector ya es mayor.- Dice mi madre con las manos en las caderas.
Mi padre da un soplido de resignación.
-Deacuerdo, te quedarás en el departamento que utilizaba Adriá y Danae en sus misiones, ya que está ocupado con todo tipo de arma y condiciones.- Esbozo una sonrisa y me mira fijamente - No quiero que nadie sepa lo que eres Lavinia, ten mucho cuidado aunque se que antes tu no dejarías que te tocaran un pelo.
-Gracias papis- Me acerco a cada uno para dejar un beso en su mejilla y un abrazo. - ¿Adria me ayudarias a llevar mis pertenencias al departamento?
-Esta bien.
Miro mi reloj y veo que ya es hora de marcharme, me despido de todos y me dirijo donde he quedado con mis mejores amigas para marcharnos. Nos saludamos con un abrazo super fuerte.
-¿Mis chicas estáis preparadas para una nueva experiencia en nuestras vidas?.
-Claro que si, ¡¡¡VAMOS A LA AVENTURA!!!- dicen Katixa y Hirune.