Habla normal / "Eres de una realidad distinta, ¿no?"
Pensamiento normal / '¿Quién es este sujeto?'
Habla sobrenatural / "Eres débil"
Pensamiento sobrenatural / "Son solo seres inmundos"
Nombre de Tecnica / -Raiton: Hikari no Katana-
Idioma diferente / Barrera de idioma
Habían pasado años desde que la Cuarta Gran Guerra Shinobi había acabado. Con ello trajo paz parcial a las cuatro aldeas sobrevivientes. Y con ello una nueva luz, el hijo del Septimo Hokage no oficial, había nacido. Pero con un pequeño defecto, sus vías de chakra no existían.
Eso trajo una pequeña decepción de aquel haz de luz, esperaba dar a luz un hijo poderoso, que cuando él muera pudiera seguir con su legado de mantener la paz. Así que se hizo lo impensable. Uzumaki Naruto mató a su hijo.
Oh, eso era lo que se decía en los rumores, la verdad no era muy clara pero era simple. La diminuta criatura se había desvanecido por cada segundo, al tener una ausencia de vías, fue muriendo, la energía del chakra está basada en energía física y espiritual, al no tener una de las energías, le llevó a la incapacidad de poder acceder y canalizar la fuerza vital que mantenía en funcionamiento su cuerpo.
Muriendo a los pocos días de haber nacido. Su muerte solo trae tristeza a su padre y mayormente a su madre. Por un tiempo de depresión, decidieron no tener hijos. No podían esperar que un hijo suyo muriera de la misma forma que el primero, así que por un acuerdo mutuo decidieron no tener hijos por el momento.
En este momento el día en que había nacido su hijo, era su aniversario. Junto con eso el dia en el que se decidió la personalidad de su padre Uzumaki Naruto, ya no sonreía, ya no era el mismo. Todos sabían que la muerte de su hijo había causado esto, pero cinco años igual era de lo peor, Uzumaki Naruto había demostrado que cualquier cosa que se le ponía enfrente él la superaría. No importaba que, batallas, competencias, camaradas muertos, familiares, disputas entre naciones. El siempre las resolvía, pero la muerte de un hijo, nunca lo pudo hacer, cayendo en depresión.
Ahora el número uno, e impredecible shinobi, no era más que una cáscara vacía de lo que era en su tiempo pasado.
Sentado en su escritorio, del que se hacía llamar un shinobi indomable, estaba firmando papeles con una expresión vacía.
"Señor Septimo" el mencionado levantó la cabeza de los papeles viendo al frente, a su hermana mayor Shizune.
Mirándola impasiblemente, Naruto solo asintió, indicando que prosiguiera. "Se ha avistado dos pequeñas energías desconocidas, Uchiha Sasuke, las encontró solas en medio del bosque en las fronteras, según el informe, ellas vinieron en busca de ayuda, pero una de ella fue capturada" tomando una pausa centró toda su atención en Naruto quien este estaba quieto antes de abrir la boca "Y eso en que nos concierne? si buscan ayuda para un enemigo diles que tienen que pagar para solicitar una misión, si eso es todo… te puedes retirar" volviendo su vista a los papeles, no vio la mirada decaída de Shizune quien solo hizo una reverencia antes de salir de la sala.
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Después de la Gran Guerra y el fatídico día de Uzumaki Naruto, él menciona y ahora proclamado Septimo Hokage, anuncio a las aldeas, que un dia en especifico, se daría una batalla, más específicamente un torneo, entre mercenarios, renegados. Esto para decidir y seleccionar el más fuerte en los criminales, si pueden llegar al primer lugar del torneo pueden ser libres, pueden hacer lo que sea, por aproximadamente un año, y no serán sentenciados a muerte ni perseguidos a muerte.
Esto se debe a que, tantos años de paz, fueron aburridos para todos los shinobis, necesitaban algo de acción, fueron educados de esa forma. En una votación dentro de las cinco naciones, se decidió un torneo, para shinobis y mercenarios, aquellos que fueran a participar, se les declara el mejor, y aquellos que sobrepasan el término shinobi, se les propondrá limitaciones para un mejor emparejamiento.
En estos momentos nos encontramos con una chica de cabello blanco encadenada a una pared, mirando al frente. 'Este lugar es raro… ninguna persona ha llegado a mi, no han intentado nada hacia mí, ¿será que no estamos en casa?'
*Clank*
Despertando de su ensoñación, vio como una persona se estaba acercando a su celda "¡Despierta es tu hora de pelear!" confundida, miró hacia la persona que era mujer, algo joven pero con unas cuantas cicatrices en el rostro.
"¡Tengo algo en la cara, niña. Te he dicho que te prepares!" la mencionada solo pudo intentar moverse pero las cadenas en sus muñecas le dificultaron su movimientos. "No necesito que te me acerques, lo que te pido es que te pongas de pie" no entendió nada de lo que dijo, pero pudo suponer que quería que se levantara
"¡Piso 3CE solicito transporte al campo de batalla!" la señora gritó, mientras ponía su mano en una especie de glifo, que se le hacía familiar. -Fūinjutsu: Chūō Shunkanidō-
Escuchando una especie de nombracion de técnica, lo único que puedo hacer Weiss fue solo mirar. No sabía quienes eran ellos ni lo que decían. Pero lo único claro que tenía en la mente era, que este lugar no era nada bueno para ella.
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