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Si todo continuaba como el pasado, un año más tarde el reino de los enanos lograría escapar del bosque infinito bajo la dirección de Hreidmar, el rey avaro.
Dentro de su ciudad subterránea, ejércitos de enanos gritaban eufóricos al presenciar el renacimiento de su rey, cada uno de ellos sintió que su cuerpo se fortalecía en varias capas solo por la bendición de su nuevo líder.
En el centro de la ciudad, un castillo protegido por dos estatuas gigantes era el lugar de reunión de todo el ejército, sus grandes murallas tenían grabadas las imágenes de sus guerreros más poderosos durante su historia.
Usando una armadura de acero enano, y un martillo ornamentado con el símbolo de un cristal de sangre, Hreidmar hablo a su pueblo.
—Soy un enano criado en la guerra.
—Como un guerrero enano, mis manos solo conocen el acero bañado en la sangre de mis enemigos.
—No existe piedad para los que alcen su mano contra nuestra raza.
—Los imperios temblaran cuando escuchen mi nombre y el de cada uno de ustedes.
—Lamentaran el haberse convertidos en nuestros enemigos.
—Ahora, alcen sus martillos y cumplan el juramento que hicieron el primer día.
—Es momento de llevar nuestra venganza a esos malditos lagartos
Como una marea imparable, las voces de millones de enanos gritaron al unisonó.
—¡Guerra!—
La raza humana no era la única atrapada en el bosque infinito, cada cierto tiempo los habitantes de un mundo aleatorio eran transportados sin poder defenderse, solo aquellos que pudieron enfrentar a los monstruos nativos conocían al culpable de su destino fatídico.
La batalla de Jin contra el grupo de Ma Teng le hizo abrir sus ojos, él se había concentrado demasiado en sobrevivir, olvidando todas las oportunidades que el sistema le entrego en el primer año para aumentar su fuerza.
Revisando las misiones, Jin guardo los dos núcleos dorados que obtuvo antes de llegar a su nuevo hogar. Fue un golpe de suerte que durante la noche el presenciara la batalla a muerte entre dos criaturas de nivel dorado, robando sus núcleos cuando ambos cayeron sin vida al suelo.
Jin necesitaba eliminar 5 generales para conseguir la tienda del sistema, el problema era que después de que la marea de monstruos comenzara, los generales en sus líneas nunca se encontraban solos, si Jin quería completar la misión, debía encontrar el momento correcto para actuar.
—Jin-san, puedo pasar— la voz de Maria lo saco de sus pensamientos, él la había llamado porque necesitaba su ayuda.
—Adelante— abriendo su inventario, Jin dejo una variedad de minerales sobre la mesa, la mayoría de estos los consiguió en el almacén privado de Ma Teng.
Sentándose frente a Jin, Maria frunció su ceño al ver que Jin no reacciono a su vestido, este era de un color azul marino con un corte pronunciado en su pecho, Margarita lo había elegido al escuchar que Jin la llamaba a su habitación.
Tomando su largo cabello dorado, sus ojos se llenaron de deseo cuando una roca con manchas verdes resalto sobre todas las demás.
—Jin-san, ¿Puedo tener esa roca?...mi habilidad parece reaccionar a ella— dijo con deseo, sus manos quisieron extenderse hacia ellas, pero no hizo ningún movimiento esperando la respuesta de Jin.
—Todo lo que esta en la mesa es tuyo— dejando la roca en manos de Maria agrego —Esa roca la obtuve de una veta de denerita, aunque no existen muchas vetas cerca de nosotros, si es muy importante para ti traeré más cuando vuelva—
Manejando la roca con cuidado, Maria cerro los ojos y canto un hechizo, ahora que Jin iba a partir quería entregarle un regalo para que él se protegiera.
Mientras sus palabras fluían, un vórtice metálico se formó delante de ella con una fuerza invisible, unos segundos después la roca de denerita se fragmento en miles de pedazos mientras una corriente de aire apareció en la habitación.
Esta era la primera vez que Jin observaba la habilidad de Maria, usando evaluación Jin sintió que había ganado la lotería al tenerla a su lado.
Maria Evans, 28 años
Raza: 100% humana
Títulos: Doncella de hierro
Habilidades especiales: Creación de armas
Creación de armas(principiante): Permite dar forma a los metales para crear o fortalecer armas. Mejora con el uso constante.
Doncella de hierro: Con una naturaleza indomable, el cuerpo de la doncella de hierro se fortalece al usar minerales preciosos. Si se cumple los requisitos, la princesa de hierro puede obtener una nueva habilidad especial.
—¡Un título!—
Los títulos eran algo que solo se podía obtener en un golpe de suerte, cada uno de ellos podían brindar un gran impulso al nivel de batalla personal. Emily Miller fue una de las personas que obtuvo uno de los títulos mas poderosos en la raza humana, Jin estaba seguro de que si ella lograba seguir mejorando con su Deseo Nocturno, ella sola podría derribar una ciudad grande.
Aun faltaban 5 años para que el cáncer de Emily arrebatara su vida, si Jin lograba mejorar el sistema al nivel mas alto estaba seguro de poder curarla.
Después de unos minutos, el mineral verde brillante desapareció dentro del vórtice junto a una presión invisible.
Al abrir los ojos, una daga ligera apareció sobre las manos de Maria, esta media 48 centímetros con una empuñadura corta envuelta por una capa verde.
—Jin-san, espero que esta daga lo proteja cuando esté en peligro—
Luego de entregarle la daga a Jin, Maria sintió que su mente se desvanecía, cada vez que ella creaba un arma nueva, ella siempre tenia un leve dolor de cabeza, pero esta vez fue mas fuerte que todas las anteriores.
—Descansa aquí, llamare a las demás para que te cuiden—
Guardando la daga en su inventario, Jin se acerco a Maria y sin previo aviso él le robo sus labios —Te ves muy hermosa con ese vestido—
Aunque fue solo por unos segundos, el rostro de Maria se ruborizo al ver que Jin salía de la habitación.
La noche ya había llegado, caminando por el borde del rio, la luna llena recibió a Jin. El ya había avisado a todos que dejaría el refugio por unos días, aunque Leina no estuvo de acuerdo con su partida, Jin le prometió algo que solo ella pudo escuchar, dejándolo partir.
Cuando la sombra de Jin cruzo el rio, Xiao Mei salió de las sombras con la mirada fría como el hielo, aunque su mirada solo duro unos segundos, un lobo que merodeaba en la orilla cayo sin vida luego de ver esos ojos afilados.
…
Era el segundo día desde que Jin abandono el refugio, avanzando hacia el sur, en el camino tuvo que esconderse al sentir presencias más poderosas que él.
La fuerza de Jin estaba al nivel de una criatura dorada de bajo nivel, si él se descuidaba en una batalla podría ser rodeado resultando en su muerte. Aunque él podía emplear su aura para crear ilusiones, esta solo servía en oponentes más débiles que Jin, con el tiempo esta habilidad perdería su ventaja, teniendo la necesidad de fortalecerse más.
Habilitar la tienda del sistema era el objetivo de Jin. En su lista de objetos, un frasco violeta con un líquido burbujeante era el mejor ítem que Jin podía usar sin tener consecuencias en su cuerpo.
Al caer la noche, cientos de arañas gigantes, con el busto de un hombre sobre ellas se mantuvieron vigilantes. La altura de las criaturas grises rondaba los 3 metros, sus largas patas llenas de espinas eran capaces de atravesar la piel de un hombre como mantequilla.
Deslizándose sin hacer ningún sonido, la sombra de Jin apareció al exterior de la única carpa en el campamento, diferentes a los humanos, cada vez que Jin caminaba cerca de una de las arañas, están miraban en su dirección, pero al no encontrar nada extraño ellas regresaban a su lugar.
Entre los generales de la marea de monstruos, existían algunos que no solo se guiaban por su instinto, teniendo una alto nivel de pensamiento, ellos siguieron las ordenes solo para extender un tiempo más su existencia.
Luego de que la ronda de guardias se alejara de la carpa, Jin entro sin hacer ruido. En el interior, telas de diferentes colores colgaban del techo, revelando la silueta de una araña durmiendo en el centro de ellas.
Preparado para cortar la cabeza de su objetivo, Jin sostuvo su espada y se acercó evitando tocar las telas. Antes de ingresar el uso evaluación sobre la carpa, todo el material, incluida las telas, era una trampa creada por la criatura que dormía en el interior.
Aun así, no dudo cuando empujo su espada contra la araña atravesando su cuerpo sin que recibir ninguna resistencia.
1 de 5 generales restantes
1 de 100 generales restantes
Dos misiones se actualizaron en el sistema.
—¡Solo 4 más!— grito en su interior.
Antes de poder celebrar su victoria, el suelo bajo sus pies comenzó a temblar con fuerza. Preparándose para huir, Jin perdió el equilibrio cuando un agujero gigante se tragó todo el campamento.
Descendiendo a gran velocidad, Jin cubrió sus oídos cuando un grito agudo hizo vibrar las paredes de todo el lugar, incluso su alma pareció quebrarse cuando un flujo de miasma invadió el aire.
A su lado, las arañas humanoides intentaban aferrarse a los muros evitando que la corrosión del miasma dañara sus cuerpos, entre ellas algunas desaparecieron cuando grandes tentáculos llenos de ventosas los arrastraron a la oscuridad.
Al final del abismo, una tortuga de 3 cabezas despedazaba a las arañas en solo segundos, su tamaño era tan grande como una montaña, solo una de sus pisadas era capaz de crear una fisura que se extendió por más de un kilómetro.
Cuando la ultima araña cerca de ella fue devoraba, miles de tentáculos salieron de su caparazón y se lanzaron hacia el cielo, estos se movieron a gran velocidad atrapando a todas sus presas.
Junto a un grito agudo, miles de criaturas en la superficie huyeron aterrorizadas al sentir la poderosa presencia que despertó en el bosque, las mas débiles cayeron sin vida mientras la sangre salía por sus orificios.
—¡AH!— liberando su aura, Jin apoyo una de sus piernas en una de las arañas y se impulsó hacia el muro, un instante después la araña humanoide vio a Jin con los ojos llenos de rencor cuando los tentáculos la atraparon arrastrándola al abismo.
Desde las profundidades se podía escuchar los lamentos de quienes eran devorados en vida por la tortuga, cada segundo que pasaba era una vida menos en el abismo.
La presión en el abismo aumento un nivel más, con los ojos rojos, soportando el dolor sobre su cuerpo, Jin golpeo el muro de piedra creando un agujero lo suficientemente grande para que el entrara, en la caída él había perdido su espada, fue gracias a la daga que le dio Maria que el pudo sostenerse en el muro.
Escondiéndose en su interior, la presión sobre su cuerpo no disminuyo y la sangre comenzó a salir por sus ojos. Apretando sus puños Jin no se detuvo y continúo avanzando mientras la tierra cedía a sus golpes.
—Eva, lograste identificar a esa criatura…porque la evaluación no funcionaba sobre eso— esta era la tercera vez que el sistema fue inútil para él, Jin sabía que el sistema no era omnipotente, pero algo en su interior le advirtió que la tortuga era algo más allá de la imaginación.
Solo una vez en el pasado Jin pudo sentir una presencia con el mismo poder, en esa ocasión la ciudad de Tirro en el imperio Valiro desapareció en solo una noche, aun con millones de soldados de nivel dorado y cientos de nivel platino defendiendo sus murallas, la fuerza imparable devoro todo a su paso, dejando solo un yermo vacío al día siguiente.
Después que el imperio Valiro enviara a dos de sus ejércitos más poderosos, la criatura fue derrotada junto a la pérdida de 5 millones de sus mejores soldados.
—Aún no he recuperado mi fuerza, me es imposible identificar a una criatura de ese poder—
Jin no podía culpar a Eva, fue Jin quien no cumplió las misiones que el sistema le entregaba, con cada misión finalizada Eva recuperaba un poco de su fuerza, ahora le faltaban 4 generales más para habilitar la tienda, con eso Jin estaría un paso más cerca de ser tan fuerte como antes.
Después de media hora sin detenerse, la presión en todo el lugar disminuyo un poco, pero en la superficie los gritos continuaban sin parar.
En el cielo, dos aves sobre las nubes observaron curiosas a la tortuga en el abismo, ambas no tuvieron miedo del poder detrás de el y esperaron el momento para atacarlo.
La tortuga, usando su cuerpo provoco grande fisuras en el suelo, de ellas la lava emergió inundando el abismo con una gran capa de fuego.
Asombradas por el espectáculo, una de las aves salió detrás de las nubes y se lanzo hacia la tortuga, ella temía que su presa escapara escondiéndose dentro de la lava.
Los monstruos mas cercanos quedaron sin aliento cuando un cuervo gigante cayo del cielo, con sus largas garras preparadas para desgarrar a su presa, ella no sintió ninguna amenaza de la tortuga.
Cuando la lava cubrió mas de la mitad de su cuerpo, una bola de miasma apareció en la boca de la tortuga.
¡BOOM! Envuelta por lava ardiente, la bola de miasma impacto en el cuerpo del cuervo quemando gran parte de su cuerpo.
Enfurecida, el ave comenzó a rasgar el caparazón de la tortuga con sus filosas garras, con cada uno de sus golpes, la onda resultante le quito la vida a las criaturas mas débiles que aun podían respirar.
Entre ellos, Jin perdió la consciencia, quedando a solo un paso de perder la vida.
Después de que la tortuga escondiera su cuerpo dentro de la lava, el cuervo destruyo el abismo creado por la tortuga y desapareció entre las nubes, dejando un rastro de terror a su paso.