—Así que, tienes disfunción eréctil, ¡jajaja! Todavía hay hombres con disfunción eréctil en estos días —Rong Shengsheng mantuvo una cara fría, realmente quería golpear a Li Jingming—. Él había dicho que siempre que ella traicionara a Hanxian y se convirtiera voluntariamente en su lacayo, él le daría la medicina, pero él no dejaba de faltar a su palabra una y otra vez.