—Me ha dicho Kyrie que estás buscando adquirir bienes por valor de un millón de dólares —preguntó Connor, entrecerrando los ojos.
—Hoy en día, poner dinero en el banco es solo alimentar parásitos, y lanzarlo al mercado de valores es como tirarlo a un agujero negro sin dejar rastro. ¡El contrabando, eso sí que es donde está la verdadera ganancia! —asintió y dijo Basil Jaak.
—El contrabando es un delito grave, mientras que esas otras dos opciones no son ilegales en absoluto —entrecerró los ojos y sonrió con desdén Connor.
—Sólo es un delito grave si te atrapan. Si no, haces una fortuna —se inclinó cerca de Connor y susurró Basil Jaak.
—¡Jaja! —Connor no pudo evitar estallar en carcajadas—. Sampson, eres un hombre honesto de verdad, así que seré directo contigo. Simon fue encarcelado, y quién sabe cuándo saldrá y si incluso podrá hacer este trabajo de nuevo, así que necesito encontrar a otro agente para que trabaje como mi subordinado. ¿Te interesa, Sampson?