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—Ren no tenía que perder tiempo compitiendo con Gran Dinastía por un mero Tikbalang. Había un pez más grande que freír —pensó.
—Una vez que el Tikbalang estaba congelado y no podía hacer nada, era solo cuestión de tiempo antes de que Gran Dinastía matara al monstruo.
—Una vez atrapado, el Tikbalang era fácil de manejar.
—Mientras ellos se regocijaban con los botines, Ren se preparaba, pues la verdadera amenaza estaba a punto de mostrarse.
—Cuando el Tikbalang desapareció, el bosque cambió, y fueron transportados a un claro amplio de hierba como en un campo abierto.
—Era hora —pensó Ren—. Debería haber llegado aquí hace horas, pero gracias a la interferencia del Tikbalang, había perdido muchas horas.
—Pero no importaba... al menos ahora Ren podría usar a Pii si es que lo necesitaba, ya que la [Evolución] del pequeño se reiniciaría después de seis horas. Sería un desperdicio si no la usara ahora.