—¿Es esto siquiera posible? —preguntó Erwin.
—¿Le ganó a Matthew? —era la pregunta que resonaba entre los susurros de los estudiantes.
—¡No puedo creer esto! —exclamó uno de ellos.
—Supongo que es la sangre del Dios de la Espada —murmuró otro, tratando de encontrar una explicación.
En la clase de arte con espada, estaba sucediendo un combate y esta vez era un combate contra Matthew de Rango 2 y Asher Greville de Rango 8.
Fue Erwin quien les dijo a ambos que combatieran, pero ni él vio venir este resultado.
La muñeca de Matthew estaba rota, mientras que Asher estaba de pie con el sudor cayendo por su rostro.
Erwin frunció el ceño, pero miró al instructor para anunciar el resultado.
—Asher Greville ha ganado —dijo el instructor.
Asher se dio la vuelta, mientras que Matthew se levantó con una mirada de frustración en su rostro.
Él era el espadachín más fuerte entre los estudiantes de Segundo Año y era algo de lo que se enorgullecía.