Con Wu Qi interfiriendo en la subasta, el director Shao había alcanzado su límite. Pero luego vio a los actores de la A-list y a los gerentes mirándole, adivinando qué haría él, el Director Shao apretó los dientes.
—Abuelo, siempre he sido intimidado por estos artistas de Starlight Entertainment. Esta es mi única oportunidad para mostrarles su lugar. ¿Puedes ayudarme, solo esta vez? —suplicó Shao Heng a su abuelo.
Se podría decir que la desvergüenza de Shao Heng había alcanzado otro nivel. Más que decir que los artistas de Starlight Entertainment lo intimidaban, debía decirse que esas personas tenían mucho más talento que Shao Heng y por tanto directores y productores preferían contratarlos a ellos en lugar de a Shao Heng cuando se les daba a escoger.