La sonrisa de Yu Holea no se inmutó.
—Entiendo, diosa —nunca mencioné que quisiera eliminar o purificarla. Sin embargo, creo que el problema es como una enfermedad mental...
La diosa frunció el ceño.
—¿A qué te refieres?
—A lo que me refiero, diosa, es que la corrupción, como una enfermedad mental, no puede ser simplemente erradicada con una única acción o hechizo. Requiere un enfoque multifacético.
—Sanar el alma, abordar las causas subyacentes y proporcionar apoyo y cuidados continuos. No se trata de purificar; se trata de comprender y tratar los problemas raíz.
La diosa la observó pensativa, su mirada menos severa.
—Propones un enfoque holístico entonces —uno que aborde la corrupción en su núcleo en lugar de simplemente suprimir sus síntomas.