—¿Cómo está? —preguntó el rey Jian al señor Everon, quien con cuidado vendaba el hombro herido de Menarx con la ayuda de Neveah.
El señor Everon le pasó la venda a Neveah y ella la colocó suavemente alrededor del torso de Menarx para estabilizarlo antes de que el señor Everon terminara de vendar suavemente el área lastimada.
—Ha perdido una tonelada de sangre, pero Narx es fuerte. Ningún órgano vital fue afectado, por supuesto no gracias a su atacante. La lanza le rozó la principal vena alar por muy poco.
—Supongo que estaba demasiado oscuro y el vuelo de Menarx era rápido, así que su atacante solo le alcanzó en el hombro. Si Menarx hubiera sido alertado de la presencia de su atacante, no habría tenido ninguna oportunidad.
—La herida es bastante profunda y eso se debe a que zarandeó su miembro lesionado durante el vuelo de regreso, diría que tendrá problemas para mover su brazo derecho por un tiempo.