Chương 37: Capítulo 37: Encuentro inesperado

Yu Qi y Feng Yue entraron a un restaurante cercano para almorzar. Tomaron una mesa un poco escondida de todos. No querían ser molestadas por algunas chicas locas.

—¿Quiénes son ellas? —Yu Qi empezó a preguntar mientras jugaba con la pajita.

—Mis excompañeras de clase. Esas chicas siempre son así. Les gusta buscarme problemas. Un grupo de chicas arrogantes. Piensan que pueden hacer lo que quieran por sus padres. —Feng Yue le explicó a Yu Qi.

—¿Tienes algún plan después del almuerzo? —Yu Qi preguntó otra cuestión cerrando ese tema desagradable.

—No. ¿Qué pasa? ¿Quieres ir a algún lado?

—Sí. Necesito algo de dinero. ¿Sabes dónde está el banco más cercano?

—Sí, está a la vuelta de la esquina. Te llevaré allí después de esto. Pero, ¿por qué? ¿Quieres comprar algo? —Feng Yue preguntó acerca de eso.

—Sí, quiero comprar algo. Pero comamos primero. —Yu Qi vio que el camarero ya traía su orden.

Después de un almuerzo agradable, se dirigieron al banco más cercano. Llegaron al banco después de caminar unos 15 minutos. Había pocas personas en el banco. Así que Yu Qi asumió que el proceso para retirar dinero podría ser más rápido de lo que pensaba.

Tomó un número y esperó un rato. Llamaron a su número y se acercó al mostrador para continuar con su propósito. Después de que el proceso estuvo resuelto, se dirigió hacia Feng Yue que la esperaba.

—Yue, quiero ir al baño de mujeres primero. Espera un momento.

—De acuerdo.

Yu Qi fue a un oficial del banco y preguntó por la dirección al baño de mujeres. El oficial del banco le dio la dirección, así que ella fue por ese camino. Después de unos 15 minutos, regresó a donde estaba Feng Yue.

'Algo era extraño.' Yu Qi vio que las barras de hierro que indicaban que el banco estaba cerrado bajaban cubriendo la entrada principal del banco.

—No hagas ninguna tontería. Te dispararé si te atreves a hacerlo. —Un fuerte grito de algunos hombres hizo que Yu Qi se alertara de su entorno.

Rápidamente escaneó alrededor. Podía ver a tres hombres que vestían ropa negra y también cubrían sus caras con máscaras negras. También estaban equipados con armas de fuego.

'Beretta M800, Tipo F Cougar, cada cargador contiene 15 +1 (1 en la recámara) balas de 180 mm, equipada con una función de espera.' Eso fue lo que vino a su mente cuando escaneaba el arma.

'Bo Ya, ¿estás ahí?' Yu Qi llamó a Bo Ya.

'Sí, maestra. Estoy aquí.' La dulce voz de Bo Ya respondió a su maestra.

'Solo quiero preguntarte una cosa. ¿Puedo sacar un arma de mi espacio?'

'Técnicamente sí. Pero Maestra, podría ser un problema más adelante.'

'¿Cuál es el problema?'

'Maestra, podrías ser interrogada sobre el arma por las autoridades. ¿Cómo responderás? No puedes simplemente hablarles de tu espacio.'

'Owh... Sí. Nunca pensé en eso.'

—Si quieres manejar esta situación, encuentra a la persona más cercana que pienses que es del grupo de ladrones, noquéalo y toma su arma —dijo Yu Qi.

—Hmmm... —murmuró para sí.

—Bang. El sonido de un disparo se pudo escuchar.

—¿Te atreves a jugar una jugarreta frente a mí? Eso es lo que conseguirías. Date prisa. Pon el dinero en la bolsa rápidamente —ordenó el ladrón después de haber disparado a un hombre. Parecía que ese hombre era el gerente del banco.

Yu Qi tenía que hacer algo. Vio que un hombre del grupo de ladrones se movía y se paraba cerca del lugar donde ella se estaba escondiendo ahora. Recordó lo que aprendió del instructor que le enseñó sobre artes marciales. Para noquear a una persona, aplicar una fuerza fuerte directamente al cuello. Claro y afilado.

Yu Qi respiró hondo. Concentrarse. Tener que encontrar la oportunidad. En ese momento, vio que los otros dos hombres le daban la espalda al hombre que estaba tratando de apuntar. Rápidamente tomó acción. El hombre cayó al suelo. Afortunadamente, había mesas que cubrían a Yu Qi. Rápidamente se escondió.

Los otros dos hombres se dirigieron a su amigo cuando oyeron algo caer. Cuando vieron que su amigo no estaba allí, apuntaron al azar en la dirección del último lugar donde estuvo su amigo.

Yu Qi tomó el arma. Ahora se levantó y apuntó a la muñeca de uno de los hombres. Disparó el arma. La bala pasó directamente por su objetivo. El hombre gritó. A continuación, apuntó al segundo hombre. Descubrió que ese hombre ya había sido reducido por otro hombre. Ataron a los tres hombres juntos.

—Llama a la policía y al médico, rápidamente —el hombre que la ayudó dio la orden al oficial del banco.

—Yu Qi —Feng Yue fue hacia Yu Qi.

—¿Estás bien?

—Sí.

—Espera aquí, quiero ver al hombre —Yu Qi fue a ver al oficial del banco que había sido disparado—. Dame el botiquín de primeros auxilios —gritó con fuerza.

Un oficial del banco tomó acción. Examinó la herida que recibió del disparo, no era mortal. Por suerte, tal vez debido a un mal apunte, la bala pasó a través de su muslo.

—No te preocupes. Estarás bien —ella dijo alentadoramente al hombre, mientras sus manos estaban ocupadas limpiando y vendando esa herida.

Llegaron la policía y el médico. Yu Qi explicó la condición del hombre al oficial médico.

—Yu Qi —Feng Yue llamó a Yu Qi después de que vio que Yu Qi había terminado con su trabajo.

—¿Asustada? —Yu Qi tomó la mano de Feng Yue y la sostuvo.

—Sí, pero estaba más asustada cuando te vi actuar. Y ese arma. ¿Cómo sabes disparar? —Feng Yue le preguntó.

—Fue solo una coincidencia. Solo tomé el arma y apunté al azar a ese tipo. Nunca pensé que le daría en la muñeca —Yu Qi mintió.

—¿En serio? —Un hombre se unió a su conversación. El mismo hombre que la había ayudado antes.

—Sí... —Yu Qi respondió.

Ese hombre era un hombre muy guapo con ojos color avellana. Estaba observando a Yu Qi. Yu Qi estaba en modo alerta. 'Este tipo es un hombre peligroso'. Podía sentirlo.

—Oye, Yu Qi. Permíteme presentarte. Este es mi primo materno, Long Hui. Hermano Hui, esta es mi amiga. Llámala Yu Qi —Feng Yue le presentó Yu Qi a ese hombre.

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