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Afuera del hotel, el coche sedán negro acababa de llegar y estaba aparcado con firmeza al frente.
El chófer todavía tenía que aparcar el coche y no se bajó. Gu San salió primero y ayudó a las personas en el asiento trasero a abrir la puerta. Miró hacia los escalones de la Mansión Imperial y dijo en voz baja —Maestro Wang, Señorita Qiao, hemos llegado.
Después de jugar a un juego, Qiao Nian guardó su teléfono móvil y se dio cuenta de que el coche se había detenido. Ya habían llegado al restaurante.
Se bajó del coche con calma y miró su teléfono móvil.
En cuanto cerró el juego, vio muchos mensajes sin leer.
Yuan Yongqin y Nie Mi le preguntaban si había bajado del avión.
Qiao Nian respondió.
Sólo el mensaje de Qin Si llegó al final. [Hermana Qiao, ¿ya llegaste?]
Qiao Nian no había respondido.