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—Ella había escuchado la arreglo de Jiang Xianrou. —De hecho, no estaba mal. Si no fuera por el hecho de que Jiang Xianrou era sobresaliente, podría haber sido una buena plántula. No era imposible cultivarla. —Sin embargo, ella sabía muy bien a quién estaba buscando el Maestro Nie. Dado que él ya había hecho su elección, era inútil que Jiang Xianrou y Tang Wanru hicieran esto de nuevo. Si ella fuera Nie Mi, no renunciaría a Zhui Guang por Jiang Xianrou. —Wen Ruxia retiró su mirada al tener este pensamiento. Su admiración de antes había desaparecido, reemplazada por la indiferencia. ...