—Todos vinieron aquí con la intención de expandir sus propias redes, y nadie quería perder tiempo con un estudiante.
Por lo tanto, nadie le prestó atención ni se dirigió hacia ella.
Cuando Qin Si y Zhang Yang llegaron, la vieron.
Llevaba puesta una gorra de béisbol y estaba sentada en un rincón. Estaba apoyada en la pared con sus largas piernas estiradas. Su postura sentada era relajada y casual, y estaba mirando hacia abajo mientras jugaba con su teléfono móvil.
Los ojos de Zhang Yang eran agudos. Avistó a Qiao Nian muy rápidamente. Agarró del brazo a Qin Si y señaló en su dirección, preguntando con incertidumbre —Joven Maestro Qin, ¿cree que esa persona allí es la Señorita Qiao?
Había mirado en esa dirección y sintió que la persona sentada allí se parecía mucho a Qiao Nian.
Sin embargo, no estaba muy seguro.
El temperamento de Qiao Nian era único. No creía que reconocería a la persona equivocada, pero no todos estaban invitados a asistir al banquete hoy.