PUNTO DE VISTA DE ARIANNE
Me paré frente al espejo, elegantemente vestida con un vestido de gasa rosa que caía hasta mis tobillos. La tela se sentía suave contra mi piel, y las ranuras en mis mangas dejaban mis brazos descubiertos, revelando las intrincadas runas grabadas en mi piel. Las runas brillaban suavemente, un recordatorio de la magia antigua que corría por mis venas.
Hoy era la ceremonia de cambio, un día que había estado anticipando con una mezcla de emoción y ansiedad. Era un día que marcaría un nuevo capítulo en la vida de los gemelos, un día en que abrazarían completamente su destino y se convertirían en miembros de la manada.
Mientras retorcía mi pelo hacia la parte superior de mis hombros, no pude evitar sentir un torrente de energía nerviosa. Realmente tenía miedo, las cosas han estado un poco tranquilas últimamente.