Sunny había enfrentado numerosas pruebas escalofriantes en su tumultuosa vida, pero el Desierto de la Pesadilla era, quizás, la más angustiosa de todas. Perdido en una verdadera Zona de la Muerte, perseguido por una Gran Criatura de la Pesadilla y agotándosele el tiempo... veía pocas esperanzas de salir con vida de esta tribulación.
Sin embargo, había dos caminos que podía tomar.
El primero era seguir a Morgan a la Tumba de Ariel, y el segundo era seguir a Mordret hacia la Tercera Pesadilla.
Ambos caminos eran igualmente letales y cubiertos en incertidumbre, haciéndole difícil elegir.
Al final, Sunny tomó la decisión más prudente —pospuso tomar una decisión por unos días.
Después de todo, había un límite de tiempo establecido por Morgan en su atrevido intento de llegar a la pirámide negra. Cuatro días... si no llegaban a la tumba del daemon en cuatro días, el Caballero del Verano la llevaría de vuelta al mundo despierto, dejando al resto atrás.