Solo más tarde, cuando regresaron a la nave voladora y miraron hacia abajo la devastación que el corto y furioso enfrentamiento entre Noctis y el Príncipe del Sol había creado, comprendieron lo que había sucedido en sus mentes. No había vuelta atrás ahora.
...La guerra de los inmortales finalmente había comenzado.
Pronto, todo el Reino de la Esperanza se convertiría en un campo de batalla y se ahogaría en sangre por su frenesí. Y luego, las repercusiones de esa locura se extenderían como una ola gigante, cambiando el mundo para siempre.
Mirando hacia abajo, Sunny no pudo evitar temblar. Los pilares rotos, la mano cercenada de un gigante, las cenizas revoloteando en el aire… este lugar, este evento, este momento en el tiempo…