—Gracias, querido. Es un gusto verlo también. ¿Cómo fue su viaje al Desierto de Sangre? —preguntó Jirni.
—Lo de siempre, lo de siempre. —Manohar dijo con un suspiro— Hace mucho calor, la gente está demasiado irritable, pero al menos la comida es genial y los niños me adoran."
—¿También fuiste invitado de la Señora Salaark? —Friya estaba demasiado sorprendida por la revelación para preocuparse por el Profesor Loco secuestrando la conversación.
—En sus sueños. —Respondió con la modestia de un pavo real macho durante la temporada de apareamiento— Voy allí por la misma razón que voy a cualquier otro lugar. Trabajo. Tengo varios proyectos secundarios con tu padre y Ily"
Un golpe rápido desde debajo de la mesa lo detuvo antes de que pudiera mencionar al dios de la muerte y la mirada de Jirni hizo el resto.
—Ilyana, una muy amable Maestra Forjadora Real que está locamente enamorada de mí. —Antes de que alguien pudiera preguntarle algo más, Manohar se llenó la boca de comida.