Si Lith comenzara a producir artefactos basados en runas, Phloria y toda su familia terminarían metidos en muchos problemas. Aun así, ella permaneció en silencio para no arruinar el momento.
—Solo puedo confiar en que Lith haga lo correcto y use el conocimiento que adquirirá de la espada de una manera encubierta. Después de todo, él ha confiado en mí con todo lo que tiene, no veo por qué no debería hacer lo mismo—. Ella pensó.
—Por cierto, ¿crees que deberíamos decirle a Friya? —Dijo Quylla—. Me pregunto si estaría más sorprendida al descubrir la verdad o indignada por ser la única de nosotras que no lo sabe.
—No nos toca a nosotras decidir —Phloria negó con la cabeza—. Las vidas de Lith y Friya les pertenecen. Ambos tienen mucho en sus manos. Además, creo que ya tuvimos suficientes emociones por un largo, largo tiempo, ¿verdad?