Scarlett permaneció sentada en su silla aunque Noah Withers había salido de la habitación quince minutos antes. Su mente luchaba con el peso de la información que acababa de recibir.
—Jude Withers ya sabe de ti... La oración retumbó en sus oídos, atormentando sus pensamientos sin cesar. Esta realidad servía como una llamada de atención, destacando cómo su enemigo, Jude Withers, siempre iba un paso adelante.
—Así que, Jude Withers, no eres un oponente fácil, ¿eh? Scarlett murmuró, una sonrisa siniestra apareciendo en su cara. Ahora, comprendía la verdad en las palabras del tío Noah. Realmente no conocía a Jude Withers en absoluto.
Había sido cegada por sus propias suposiciones.
Todo lo que sabía sobre Jude Withers se basaba en la información que había recopilado a través de sus investigaciones: un exitoso hombre de negocios y el cruel patriarca de la familia Withers. Siempre había ignorado que Jude Withers era una persona inteligente y malvada.