Poco después, su automóvil entró en el estacionamiento subterráneo. Hay un vestíbulo exclusivo para los residentes de la suite presidencial en el último piso.
El piso nunca se alquila al público. Solo Xander, como propietario, puede usarlo. Ni siquiera Carter Riley tiene este privilegio.
—¡Vamos, cariño! —Xander estaba emocionado de salir del automóvil, pero Scarlett lo detuvo. —¿Por qué te resistes? ¿No te gusta que vivamos en este lugar? —Frunció el ceño.
—¡No! No estoy preocupada por eso. ¡Pero primero necesito ponerme mi peluca!
—Cariño, no hay necesidad de preocuparse por eso. Los guardias aquí nunca hablarían de lo que vieron. Y estoy seguro de que Logan ya sabe tu verdadera apariencia, ¿verdad? —Le sonrió para tranquilizarla.
Scarlett permaneció en silencio durante un momento. Aparecer ante los demás en su verdadera forma podría poner en peligro su vida. Sin embargo, no quería que Xander pensara que estaba exagerando su miedo a ser vista por otros.