Después de unos minutos, Xander recogió la bolsa de compras y volvió al dormitorio.
Una mirada de sorpresa cruzó sus ojos al entrar en la habitación. La chica ahora estaba durmiendo en el suelo con una colcha blanca como colchón. Estaba sumergida leyendo algo en su celular con la espalda hacia él, ajena a su presencia.
—¡¿Esta chica prefiere dormir en el suelo que dormir conmigo?! —De inmediato sintió una ira sin nombre crecer dentro de él—. ¿Qué haces?
El tono helado de Xander hizo que Scarlett se estremeciera y se sentara erguida de la sorpresa. Podía ver que su rostro se veía oscuro con las cejas levantadas. Definitivamente no parecía de buen humor.
—Xander, dormiré aquí. Tú puedes dormir en la cama en paz. Y...
—¿Quién te dijo que durmieras en el suelo? ¡Levántate y duerme en la cama! —ordenó—. Aunque no me gustaba que alguien compartiera la cama con él, era un caballero.
¿Cómo podría dejar que una mujer durmiera en el suelo?