[Agencia Meteorológica de Corea - Seúl, Corea del Sur]
Noche.
*Bip --- bip --- bip*
Un pequeño sonido intermitente y apenas perceptible, producido por una extraña pero sofisticada máquina, resonaba dentro de una gran y moderna oficina.
El lugar tenuemente iluminado y aparentemente sin vida se encontraba lleno de varias mesas y escritorios. Estos escritorios estaban repletos de monitores y teclados, como si de un moderno centro de cómputo se tratara.
*Bip --- bip --- bip*
A parte de aquel pequeño sonido intermitente y de un apenas perceptible bullicio, todo estaba en calma, como si la ausencia de luz diurna fuera el indicador para esta característica quietud.
Casi todos esos monitores estaban apagados debido a que el horario de trabajo ya hace tiempo que había acabado, reinando la paz en esta tranquila noche de verano.
Sin embargo, a pesar de la aparente calma, habían algunas maquinas que aun seguían funcionando, cumpliendo sus labores tal y como habían sido programadas.
En la pared frontal de este gran salón había un videowall (muro de pantallas), el cual resaltaba notoriamente.
Este conjunto de pantallas mostraba un mapa muy detallado de la región peninsular Coreana, así como diversas tablas, números y gráficas, dando a entender que lo que se realizaba en esta oficina tenía un fin particular.
<Una cálida mujer de día~…. una mujer con clase que sabe relajarse con una taza de café~… una mujer cuyo corazón se calienta cuando llega la noche~… una mujer con tal cambio~>
De repente, la aparente calma del lugar se vio interrumpida por una chirrienta melodía.
El tono intermitente de esa pequeña alarma se entremezcló con el sonido de una pegadiza canción, la cual provenía de una de los pocos monitores prendidos.
Era una canción que se había lanzado al mercado de la música hace cinco años por uno de los cantantes más controversiales del pais.
Pese a ello, se habia convertido en todo un éxito no solo a nivel nacional, sino a nivel internacional, rompiendo varios récords en todos lados en donde se le escuchara en su momento, convirtiéndose en un fenómeno mundial.
Y esa música comenzó a rezonar a volumen bajo, junto con los tenues pitidos, en esta tranquila y moderna sala.
"Phew… aunque fue mi error… en verdad me está matando trasnocharme"
De pronto, un quejido sonó al compás de los pitidos y de la música.
Ubicado frente a la computadora que emitía la pegajosa canción, un aburrido sujeto bramó cansadamente mientras estaba recostado sobre una silla de una manera informal y desinteresada.
Sus brazos estaban colgando a ambos lados del viejo sillón sobre el cual estaba sentado, como si no tuviera fuerzas. Sus pies estaban alzados y cruzados sobre el pequeño escritorio frente suyo mientras su cabeza se reclinaba hacia atrás.
"¿Quién me manda a hacer tales estupideces y recibir este castigo? ¡aigoo!... Al menos solo me falta una semana y este tormento terminará"
Dicho sujeto, que aparentaba estar en sus treinta, volvió a lamentarse por encontrarse solitariamente en este lugar.
En otro tiempo hubiera salido a divertirse con sus amigos ya que era fin de semana y la ocasión lo ameritaba, pero ahora estaba atascado en este lugar como castigo por andar haciendo estupideces en horario de trabajo.
¡Y no era para menos, pues intentar instalar videojuegos en las computadoras de esta agencia estatal era algo realmente tonto!
Aunque sentía que este era una castigo muy agobiante, había aceptado las tres semanas cuidando el turno nocturno pues le había comenzado agarrar gusto.
Al menos así fue la primera semana, antes de que todo le pareciera realmente aburrido.
Ahora, no veía la hora de que esta tortura terminara, arrepintiéndose verdaderamente de su inmadura acción y jurándose internamente no volver a hacerlo, pues estaba muriéndose del aburrimiento en esta gran y solitaria oficina.
Y es que lo único 'emocionante' que se podía encontrar en esta oficina a estas horas era ese pequeño sonido intermitente, que aunque sea de gran importancia, con el tiempo llegaba a ser agobiante.
La Agencia Meteorológica de Corea, abreviada como KMA por sus siglas en inglés, no era precisamente un lugar en donde ocurrieran a cada instante cosas realmente alucinantes como cualquier pensaría ya que, descubrir feroces tormentas o posibles desastres naturales, como en las películas, era cosa que muy contadas veces pasaba, para suerte de todos.
Por ello se daba la queja del sujeto, pues extrañaba el turno diurno debido a que al menos en ese horario podía conversar con alguien.
"En verdad apesta no tener nada de emoción"
El hombre se volvió a quejar mientras estiraba su mano y presionaba una tecla de su teclado para subirle el volumen a esa canción.
*¡Tzzzzzzzz! *
*¡Tzzzzzzzz! *
En ese momento, un sonido estático provino desde su computadora, opacando la canción que poco a poco dejó de escucharse.
Al mismo tiempo, la pantalla del monitor sufrió una especie de interferencia, como un televisor viejo, hasta apagarse completamente.
"¿Y a hora qué? No me digas que se jodió este maldito aparato? ¡Se supone que estas computadoras son de lo mejor, por eso me castigaron al intentar jugar con ellas!"
El ahora molesto sujeto se recompuso y comenzó a mover el mouse y a machacar algunas teclas al azar mientras bramaba molesto, pero sin tener algún resultado positivo.
Presionó el botón del CPU para intentar reiniciar la máquina, pero parecía que nada funcionaba.
"Perfecto… tenía que pasarme esto a mi… carajo… de seguro me van a regañar ¡¿Acaso algo más puede pasar hoy?!"
El sujeto se llevaba las manos a la cara y se sobaba el entrecejo con un gesto frustrado.
*¡¡Bip – bip – bip!!*
*¡¡Bip – bip – bip!!*
*¡¡Bip – bip – bip!!*
"¡¿Qué diablos?!"
¡En eso, como si de una respuesta a sus quejas se tratara, el sonido pausado de la alarma que estaba sonando calmadamente se disparó repentinamente, asustando al quejumbroso sujeto y haciendo casi caer de su asiento!
"¡¡¿Y ahora qué pasa?!!"
Acomodándose rápidamente, miró sorprendido el videowall ya que una gran señal roja de alarma apareciendo intermitentemente, con unos alarmantes números en ella.
"¡Mierda… esto no puede suceder sin previo aviso, debe ser una maldita broma!"
Exclamó el ahora sorprendido sujeto, sin prestarle mucha atención a su propio monitor, el cual parecía haberse encendido nuevamente.
Ahora mismo su mirada estaba atraída por todos los datos que el videowall mostraba.
Y es que el descontrolado y desesperado sonido de esa alarma, sumado a lo que la gran pantalla mostraba, solo podia significar una cosa, una muy, muy mala.
A raíz del desastre ocurrido en Japón en el 2011 y como parte de una región realmente susceptible a desastres naturales, el gobierno Coreano había invertido una gran cantidad de dinero para poder crear un sistema capaz de detectar y prevenir diferentes acontecimientos climatológicos desfavorables, así poder prevenir a la población y con ello evitar la mayor cantidad de posibles pérdidas de vidas.
Durante cuatro arduos años de trabajo y la combinación estratégica de observaciones meteorológicas desde la superficie terrestre, supercomputadoras, satélites meteorológicos espaciales, acelerómetros y otros métodos combinados dieron como resultado a uno de los mejores sistemas de predicción.
El sistema DISPRE, capaz de predecir precisamente fenómenos meteorológicos tan complejos en base del rapidísimo análisis de los miles de datos obtenidos segundo a segundo, con un tiempo de respuesta realmente valioso, fue el resultado exitoso de todo este esfuerzo.
¡Su potencial estimando de predicción superaba el 95% de todos los casos de desastres, por lo que su efectividad comprobada era de lo mejor que se había creado!
Y durante los dos años en funcionamiento, esta era la primera vez que su alarma de perpetuo funcionamiento se había disparado, siendo una señal para nada buena, pues era un indicativo de una gran y desastrosa tormenta.
¡Sin embargo, esto no debía ocurrir puesto que hasta hace poco no se tenía datos o indicios previos que anunciaran tal terrible panorama!
Estos fenómenos no son algo que aparecen de la nada, siempre hay registros previos de cualquier cambio climatológico brusco, incluso con algunos minutos de antelación.
Pero ahora todo había ocurrido sin previo aviso.
"¡Diablos, creo que fuimos Hackeados!"
EL hombre pensó el escenario más probable mientras deslizaba su silla de ruedas hacia la computadora más cercana que estaba encendida.
Comenzó a teclear con rapidez para averiguar qué diablos pasaba mientras corría una copia de seguridad de todo este extraño evento.
Al inicio no prestó atención a lo que mostraba la pantalla de su propio monitor pues la estridente alarma realmente lo asustó.
Sin embargo, luego de un momento su vista se dirigió hacia su propia terminal, viendo algo que realmente loco.
La pantalla que hasta hace un rato se había apagado, se había encendido de golpe y comenzó a mostrar un fondo negro con una serie de patrones y símbolos dorados realmente extraños.
[[{Kēxuéj22iāmen shìtú có44ng bùtóng de jiǎodù lái jiě&&shì lìshǐ jìnch00==éng zhōng fāshēng de bùtóng shìjiàn. Tāmen zh$ōng de dà duō??shù rén shēngc//hēng shì suí##jī yuányīn, yīzhǒng cuòzōngfùzá de suíjī xìng dǎozhìle wǒmen suǒ zhīdào de yīqiè}]]
¡El que esa alarma se haya disparado sin previo aviso y solo después de que su computadora haya fallado de esa tan extraña manera lo orillaba a pensar en un posible ataque cibernético!
De pronto, el mapa en el videowall se actualizó, mostrando gráficamente la misma región peninsular que previamente mostraba, pero ahora con una cosa diferente.
Sobre ella, una inmensa sombra la cubría completamente, incluso sobrepasando más allá de los límites marítimos, mucho más allá.
*¡¡Bip – bip – bip!!*
*¡¡Bip – bip – bip!!*
"¿Qué demonios es eso? esto… ¡¿acaso uno de los satélites está fallando o es que nos han jodido el sistema?!"
¡El sujeto exclamó nerviosamente mientras miraba con sorpresa el mapa sin creer lo que tenía frente suyo, pues esta grafica no podia ser verdad ya que la escala de ese fenómeno era algo que jamás se había visto, nunca!
Sus ojos comenzaron a alterna entre la aterradora imagen mostrada en el videowall y su pantalla, la cual seguía mostrando esos símbolos extraños sin saber qué diablos hacer.
*¡Rumble!*
*¡Rumble!*
*¡Rumble!*
¡Justo cuando el pobre sujeto estaba levantando el teléfono para llamar a su superior por ayuda, una serie de atronadores sonidos resonaron fuera de las oficinas en donde se encontraba, sacudiendo violentamente los cristales de las ventanas casi hasta el punto de romperlas!
El tipo se levantó de golpe de su asiento y caminó rápidamente hacia una de las ventanas sin importarle los sonidos de alarma o lo mostrado en su pantalla, pues ahora mismo debía saber qué diablos provocó ese estruendoso ruido en el exterior.
Y lo que apareció ante sus ojos lo dejó con la boca abierta ya que el panorama frente suyo era tan aterrador como increíble.
¡El cielo nocturno, que previamente había estado despejado y sin una nube, ahora mismo parecía completamente agitado, con diversas siluetas oscuras y pesadas las cuales parecían nubes de una gran tormenta tropical!
En un abrir y cerrar de ojos, se hizo casi imposible de ver siquiera un destello del espacio, pues no había horizonte en donde terminara ese aterrador panorama.
*¡Booomm!*
*¡Booomm!*
¡Las formaciones negras continuaron rodando, espesándose constantemente y formando una masa densa sobre toda la ciudad, sobre todo el pais!
Y sin darle tiempo a que siquiera se preguntara que demonios estaban viendo sus ojos, al instante siguiente un destello luminoso atrajo su mirada, un destelló casi dorado que recorrió todo el cielo rápidamente e iluminó momentáneamente el oscuro cielo, acompañándose de un atronador sonido.
*¡Crack!*
¡Luego del atronador sonido, de lo que parecía ser un relámpago, otro más apareció, y luego fueron dos más, luego tres, cinco, diez, cien... innumerables rastros de rayos surcaban el cielo en una forma nuca antes vista, generando un resplandor que parecía haber traído el sol en medio de la noche!
*¡Crack! *
*Rumble*
*¡Crack! *
¡El tipo estaba ahora completamente aterrado ya que esto era como si estuviera viendo el cielo romperse a pedazos!
¡Sin embargo, esto no fue lo más aterrador que podia ver, pues al instante siguiente algunos de esos rayos comenzaron a caer al suelo por todas partes!
¡Era como una lluvia de relámpagos!
"Oh dios mío… oh dios mío… ¡esto es el fin!"
El sujeto regresó corriendo hacia su pupitre y cogió el teléfono para hacer una llamada.
"¡¿Hola?! ¡Hablo desde el centro de comando de la KMA! ¡Mierda! ¡Si! ¡estoy viéndolo! ¡Es inaudito, apareció de la nada! ¡llama al ministro urgentemente para-!"
*¡¡¡Booooooooommm!!! *
*¡¡¡Booooooooommm!!! *
¡Y antes de que el tipo terminara de hablar, un atronador sonido resonó por todos lados, como si una bomba de gran envergadura hubiera explotado y arrasado con todo a su paso, haciendo que el lamentable sujeto se tirara al piso mientras gritaba del susto!
"¡AHHHH! ¡no quiero morir! ¡no quiero morir!"
Gritó con todas sus fuerzas el asustado sujeto en el suelo mientras se tapaba los oídos y cerraba fuertemente los ojos en posición fetal, esperando un horrendo final.
Sin embargo, lo que consideraba era el fin de su simple vida nunca llegó, pues luego de ese aterrador sonido explosivo, el exterior volvió a estar en una inusual calma.
*Bip --- bip --- bip*
Nada se escuchaba en el exterior, ninguna luz iluminaba el cielo oscuro, lo único que se podia escuchar eran los pausados pitidos de la alarma que habían regresado a su ritmo normal, mientras que su pantalla dejaba de proyectar esos extraños patrones, poco a poco dándole paso a la música que previamente había estado escuchando.
<Eh, sexy lady~… Oh-oh-oh-oh Oppa Gangnam Style~>
El tipo, quien se levantó del piso a duras penas, comenzó a observar a todos lados con una mirada estúpida, pues hasta hace un momento el cielo se estaba cayendo, pero ahora mismo todo parecía haber vuelto a la normalidad, como si todo hubiera una mera ilusión.
¡No había pasado ni un minuto, pero la atemorizante sensación fue como si ese fenómeno hubiera durado horas!
Si no fuera por los vidrios rotos y toda la destrucción causada por el la onda expansiva de esa terrible explosión, esto podría tomarse como una terrible alucinación.
La mente del hombre casi no podía procesar lo que había ocurrido mientras temblorosamente se levantaba del suelo y caminaba lentamente hacia la ventana rota más cercana, solo para quedarse como idiota mientras miraba al cielo.
Completamente normal, como cualquier cielo nocturno de verano, realmente despejado.
"¡¿Q-Qué demonios había pasado?! ¿acaso todo fue un sueño?"
Y como si fuera una respuesta a esta pregunta, diferentes sonidos de sirenas y gritos comenzaron a resonar por todas partes de la ciudad mientras por todos lados la gente que había presenciado este terrible evento se hacia la misma pregunta.