"Jajajajajajaja ¡sí!"
"¡Ganador 26 negro!"
En un ambiente animado podías ver a múltiples personas reunidas, la gran mayoría de ellas divirtiéndose con la falsa idea de la victoria.
Miles de ryo eran movidos cada día en este lugar, significando la fortuna de algunos y la desgracia de muchos.
La gente estaba distribuida en varias zonas, cada una con su juego especial en donde diferentes individuos apostaban para obtener el tan ansiado 'premio gordo' con el cual seguirían apostando más, muchas veces más.
Ruleta, blackjack, póquer, baccarat, dados… todas las diferentes estaciones estaban siempre activas, llevándose las risas y tristezas de la gente que siempre llegaba a jugar.
Todas las estaciones eran así… menos una.
"¡Otra vez *hic* vamos con otra ronda!"
"Tsunade-sama… ya no tenemos dinero"
"¡Vamos Shizune *hic* tiene que haber dinero en las bolsas! *hic* recién hace unos días pedimos ese préstamo!"
"Haaa…. no nos queda nada…. Todo se lo gastó en apuestas y sake Tsunade-sama"
"Diablos... creo que haremos el plan número dos para*hic* salir de aquí"
"…. Okei…"
En una mesa de dados podías ver a una mujer y una jovencita discutiendo en susurros mientras el resto de personas miraban esta escena de manera expectante.
La mujer era bastante atractiva; de piel clara, con los ojos castaños y el cabello rubio claro. Su pelo era largo hasta la cintura estaba recogido en dos coletas caídas, con flequillo hasta los hombros enmarcando ambos lados de la cara. Su rostro resaltaba no solo por su belleza, sino por una marca de color violeta con forma de rombo en la frente.
Pero lo más notorio de aquella mujer era su notable y esbelta figura curvilínea, destacando un busto muy grande. Llevaba una gran chaqueta de color verde con el kanji de 'apuesta' escrito dentro de un círculo rojo en la parte posterior.
Debajo de la chaqueta tenía una camisa gris de estilo kimono sin mangas, el cual se ciñe a su cuerpo gracias a una faja azulada que hace juego con sus pantalones. Su camisa deja a la vista un pronunciado escote, dejando visible parte de sus pechos.
SI cualquier ninja viera a esta mujer la reconocería instantáneamente, debido a que ella era una de los tres Sannin de Konoha, una heroína de guerra y una de las mujeres más fuertes de todo el mundo niña, la gran princesa Tsunade Senju, quien ha sido señalada varias veces por su belleza y ha sido llamada la kunoichi más hermosa del mundo por varios personajes.
Sin embargo, ahora no quedaba nada de esa gloria o fama, ahora solo se veía… lamentable.
Los civiles no saben mucho de la vida ninja, por lo que no todos la reconocerían como la gran Kunoichi de Konoha.
Sin embargo, sí que podrían decir muchas cosas debido a su presencia en el mundo de los casinos, debido a que estaba siendo reconocida por los entendidos de los juegos como 'Densetsu no Kamo' (la legendaria perdedora) aunque esta fama aún no era grande, varios prestamistas y casinos comenzaron a sufrir por los prestamos y deudas de esta mujer.
Junto a ella se encontraba una chica de unos quince años de vida.
Tenía el cabello corto y lacio de color oscuro. Sus ojos son del mismo color de su cabello mientras que la piel clara de su rostro resalta la naciente belleza de mujer juvenil.
Estaba usando un kimono negro azulado con bordes oscuros, de mangas cortas y anchas, el cuan estaba fijo a su cintura por una faja gruesa de color rojo. Bajo su ropa tenia una camisa de red, la cual servía como una cota de malla.
Aunque esta chica podría parecer inofensiva, era una joven Kunoichi, quien tenía el grado de Chunin. Su nombre es Shizune y es la acompañante de la mujer rubia.
En los brazos de la niña se puede ver un pequeño cerdito rosa claro, muy similar a cualquier otro cerdo, aunque mantiene un rubor constante sobre sus mejillas. Viste con un chaleco rojo y un collar de perlas alrededor del cuello, dando a entender que es una hembra.
"Vamos mujer, que dices ¿seguiras divagando o demostrarás que no eres una perdedora?"
Un sujeto x habló mientras sonreía para sus adentros. El dinero que estaba ganando con la desgracia de esta mujer era mucho, por lo que quería tentar su suerte y hacer que siga en el juego.
Aunque aun no le había pagado, la cifra en las fichas ya demostraba una jugosa cantidad.
"¡A quién *hic* estás llamando perdedora, estúpido!"
¡Tsunade se levantó de golpe con un rostro furioso!
Estaba toda sonrojada por la cantidad de alcohol que había bebido, dando una apariencia completamente alcoholizada.
"Entonces has tu apuesta y tira los dados, je, posiblemente tengas suerte hoy y ganes algo" – habló otro de los sujetos que estaban sentados en la misma mesa, el cual era compañero del primero.
"¡Claro que voy a seguir *hic* solamente que tengo que ir al baño por que he tomado mucho"
Al escuchar las palabras de la rubi, los sujetos no pensaban que ella estuviera mintiendo, ya que su estado lo corroboraba.
"¡Bueno! entonces espérenme aquí sin tocar mis fichas" – Dijo la mujer rubia mientras tomaba la mano de la niña y la jalaba – "Vamos Shizune, llévame al baño que no puedo caminar bien"
Mientras la mujer se alejaba con la niña en dirección de los baños, los dos sujetos comenzaron a reír por lo tonta que era esta mujer y la manera fácil de ganar dinero.
Justo en ese momento, un grupo de personas liderado por un sujeto con semblante tosco se acercó a este par de amigos, quienes miraron a este extraño con algo de recelo.
"Buenas noches caballeros, el gerente de este lugar me ha indicado que ustedes han estado jugando con una mujer rubia, quien va acompañada de una niña pelinegra y un pequeño cerdo ¿verdad?" – Preguntó 'amablemente' el sujeto, quien estaba seguido de varios sujetos con apariencia amenazante.
"Así es, no será más de un par de minutos ¿Por qué lo preguntas?" – Respondió uno de los amigos con un poco de temor al ver a tanta gente de apariencia no tan confiable.
Ellos dos había llegado desde muy lejos mientras probaban suerte en este lugar, por lo que no conocían a la gente de este pueblo.
"No se pongan nerviosos amigos, solo queríamos confirmar ese hecho. He estado siguiendo a esa mujer por mucho tiempo, ya que sus antecedentes por estafas y deudas han logrado molestar a mis empleadores, por lo que se me encomendó encontrarla"
Dijo el sujeto mientras les daba órdenes a los sujetos que llegaron con él, quienes se dispersaron por todo el lugar. En eso los dos sujetos que hasta ese entonces habían pensado que hicieron dinero fácil, se dieron cuenta de que hoy no sería su día de suerte.
"¡Las ventanas de los baños están abiertas, se han escapado!" – En eso se escuchó gritar a uno de los buscadores.
"¡Vamos! ¡No pueden estar muy lejos!" – El jefe y el resto de sujetos salieron rápidamente del lugar, dejando a todos conmocionados, incluidos los dos pobres desafortunados.
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"Ahh… Fiuu… jajaja, esta vez sí que estuvimos cerca"
Soportadas sobre una pared estaba descansando una sonriente Tsunade mientras Shizune respiraba pesadamente mientras sostenía a cerdito. Habían estado corriendo por diferentes direcciones para que esos dos sujetos no les siguieran el rastro, para cuando se den cuenta, claro.
La ojimiel se rió, pero al instante siguiente se puso seria al ver el rostro de su alumna.
Este era una de sus 'métodos' de escape, con los cuales habían estado sorteando a la mayoría de sujetos con los cuales se gastaba el dinero o a quienes les terminaban 'debiendo' cuando se enrolaban en diferentes juegos.
Habían pasado dos aproximadamente desde que habían comenzado esa vida, desde que Shizune se graduó como Chunin.
El motivo por el cual dos kunoichi se encontraban en esta penosa situación era un poco 'complicada' por decir lo menos.
Tsunade Senju era la nieta directa del legendario primer Hokage Hashirama Senju, siendo la heredera actual de su clan. Desde pequeña había sido una niña muy extrovertida, con una personalidad parecida a su abuelo.
Cuando se graduó de la academia ninja a una edad temprana, formó equipo con Jiraiya y Orochimaru bajo la tutoría del tercer Hokage Hiruzen Sarutobi. Desde pequeña mostró una aptitud prometedora como una kunoichi, destacando mucho en el Iryo Ninjutsu (jutsu médico)
Avanzó rápidamente en este campo, adquiriendo varios logros meritorios para su aldea. Así avanzó en este mundo, desarrollando su fuerza a un nivel en el cual nadie podía detenerla… pero a veces las personas nos afectan de diferentes formas.
La pérdida de su hermano menor fue una impactante noticia, desestabilizando parcialmente su vida. ella había sufrido la perdida de sus familiares en la guerra, quedando solo ellos dos.
La muerte de Nawaki, su hermano, fue algo que la motivó a plantearse nuevas expectativas, así como diferentes estrategias para evitar mas muertes como las de su querido hermano.
Como ninja médico, ella sabía cuál era la importancia de uno de sus congéneres dentro de cada unidad Shinobi. Su hermano había muerto por una explosión, pero pudo haberse salvado si recibía atención inmediata.
Sin embargo, esta propuesta fue rechazada de plano por los lideres de la aldea, alegando que no tenían ni personal ni el presupuesto para ello.
Entonces Tsunade se propuso crear una escuela de ninjas médicos, para lograr su objetivo planteando.
Durante el tiempo que comenzó con su proyecto, comenzó a participar en diferentes misiones, alcanzando una fama mundial al golpear críticamente al resto de aldeas, así como logran grandes proezas en el campo de la medicina.
En el transcurso de estos años Tsunade logró superar sus pérdidas no solo gracias la ejecución de sus objetivos, sino también a la presencia del que fue su novio, un tipo llamado Dan Kato.
Este tipo era un buen sujeto, quien tenia el mismo sueño que Minato, el de convertirse en Hokage. cuando su hermana murió en una misión, Dan comenzó a abogar para que los ninjas médicos conformaran parte de las unidades Shinobi.
Por este motivo Tsunade y él lograron congeniar. Ellos eran 'sobrevivientes' de la pérdida de un ser querido y lograron, en parte, superar las adversidades. Inevitablemente nació un sentimiento romántico el cual derivó en una bonita relación.
Sin embargo, los buenos momentos no duraron para siempre.
Dan murió trágicamente en una misión durante la segunda guerra ninja mientras ejecutaba una técnica poderosa. En un charco de sangre, la vida de Dan se esfumó en las manos de Tsunade, quien llegó tarde para darle atención médica.
¡Eso la quebró totalmente!
Su vida cambió completamente, llegando a desarrollar hemofilia. No logró sobreponerse de este hecho, cesando completamente todo por lo que había peleado. Se encerró en la propiedad de su clan, completamente sola, pasando los días en llanto y sufrimiento.
Pasaron los años hasta que pudo volver a salir e intentar reponerse. Sin embargo, parecía que ya no tenía propósito en su vida.
Las cosas las hacía solo por cumplir, sin objetivos ni metas. La solitaria vida comenzó a mellar su salud, derivado de malos hábitos nacidos por el dolor de las perdidas.
Tsunade perdió el sentido de superación, el sentido de apego por las cosas, incluso comenzó a perder el sentido de pertenencia a la aldea.
Solo tuvo cariño por la sobrina de Dan, quien era la pequeña Shizune, a quien la kunoichi rubia la adoptó como su aprendiz, siendo la única compañía que tenía en su vida.
Al mismo tiempo que ella iba perdiendo el apego a la aldea, los lideres de Konoha no vieron con buenos ojos esto.
La última sobreviviente del legendario clan Senju no tenía ninguna atadura a la aldea, por lo que no era algo positivo para ellos.
Si la rubia hubiera sido una kunoichi más, ellos no se hubieran preocupado tanto, pero Tsunade era una Shinobi de clase S con una fuerza sobrehumana, formó uno de los legendarios contratos con Katsuyu, una de las residentes del Bosque Shikkotsu.
Su nivel era lo suficiente para amenazar a toda una aldea ninja, por lo que su estado actual les era desfavorable.
Así que decidieron 'sugerirle' considerar una relación, con el objetivo de formar una familia y que tenga un sentimiento de pertenencia a Konoha.
La Sannin no esperó a escuchar mas de estas estupideces y decidió abandonar la aldea, no sin antes amenazar a los vejestorios de que, si se atrevían a volverle a mencionar tales cosas, ella misma se encargaría de borrarlos de este mundo, incluido a su antiguo maestro.
Aunque era la colera la que hablaba, ella se sintió ofendida por tal estupidez.
Tomó a Shizune después de que esta se graduara como Chunin. los ancianos de Konoha tuvieron que tragarse el enojo ya que era imposible para ellos lograr algo contra ella.
Tsunade podría estar al mismo nivel que Minato en clasificación, pero en cuestión de influencia eran diametralmente opuesto.
El actual Hokage había sido acondicionado desde niño, pero la rubia era una mujer que conocía la mayoría de artimañas y pestilencias involucradas en la política, por lo que abandonó la aldea.
Desde entonces, han estado viviendo este estilo de vida. aunque la Sannin 'sonriera' ante esta situación, en el fondo sabía que esto la estaba ahogando en la misera, arrastrando con ella a la joven Shizune.
"Tsunade-sama… esto…" – la joven pelinegra la miró de manera apenada a su mentora, quien no solo le había enseñado sobre los jutsus médicos, sino también a vivir este estilo de vida.
"Lo se Shizune" – respondió la rubia mientras agachaba la cabeza para ocultar sus ojos.
"Ya no podemos hacer esto, su salud esta…"
"¡Ya lo sé!... lo se muy bien… sniff… lo sé bien…"
Justo cuando Shizune iba a continuar, Tsunade respondió molesta, mientras respondía airadamente, para luego derramar unas lágrimas amargas mientras apretaba los dientes.
Ella era consciente de que esta vida, aunque no le haría algún efecto a corto plazo, estaba desgastando sus energías y ganas de seguir adelante. Así mismo, esta no era la vida que esta muchacha necesitaba.
"Lo se… perdón por esto… solo déjame pasar esto" – Le dijo la ojimiel a la Shizune, quien solo estuvo callada por un momento, luego solo suspiró y le tendió la mano a su maestra para ayudarla a levantarse.
"Vaya, vaya, esto si es muy emotivo en verdad. Al menos eres consciente de la forma en como estas criando a esta muchacha eh"
Justo en ese momento, el sujeto con apariencia ruda llegó al lugar, rodeado de todos sus seguidores. Shizune miró a estos sujetos con un poco de cautela, ya que podían sentir chakra proveniente de esta tuba, dando a entender que eran ninjas.
"¡¿Y tú quién diablos eres?! No estoy de humor para tontos que tengo resaca ¡así mejor váyanse de aquí o no me haré responsable por triturar sus huesos!"
Tsunade estaba molesta ahora mismo. Podía deducir la presencia de estos tipos por la pinta de ninjas renegados, los cuales posiblemente estarían aquí contratados por quienes le habían prestado el dinero para sus apuestas.
"Mujer, no hagas esto más difícil. Me pagaron para llevarte de vuelta a la tierra del grano en donde los prestamistas tienen un asunto que arreglar contigo" – el tipo al mando habló de manera directa mientras se acercaba al par de mujeres.
"Shizune, prepárate para pelear, es hora de que estires los brazos y practiques tus técnicas ninjas" – Dijo la rubia mientras recibía un asentimiento de su alumna.
"Ahh diablos, quería hacerlo por las buenas… vamos muchachos, atrápenla" – el líder del grupo mercenario habló, haciendo que todos se posicionaron para el ataque.
"¡Booooomm!"
En eso, un sujeto un objeto se estrelló entre los dos extremos enfrentados, levantando mucha tierra y polvo, tomando por sorpresa a ambos bandos, haciendo que los mercenarios se retiraran apresuradamente.
Tsunade se colocó delante de su alumna ya que incluso ella no pudo detectar la presencia de esto.
Cuando el polvo se asentó, todos vieron el 'objeto' que yacía en ese lugar, revelándose que no era un algo, sino un quién.
Era un tipo encapuchado, con una máscara lisa de color naranja la cual tenía patrones de líneas negras transversales y una sola abertura para el ojo derecho.
Aunque podría ser un poco extraño el atuendo de este sujeto, lo que llamó la atención de todos era su estado.
Su ropa estaba completamente hecha jirones, con rastros de sangre y laceraciones en todo su cuerpo, incluso su mascara estaba dañada. Respiraba pesadamente, tratando de dar grandes bocanadas mientras se tocaba el pecho en el lugar en donde tenía la herida más grande.
"¿Qué diablos? Como es que llegó este tipo…"
Antes de que uno de los mercenarios terminara de hablar, otro sujeto apareció al lado del que se habia estrellado.
Era un hombre alto, con cabello negro y largo. Su constitución era muy fuerte. Dando una apariencia opresiva. Aun si no se sentía alguna sensación de energía en su cuerpo.
Todos se sorprendieron, más aún la Sannin, ya que vio con sus propios ojos como ese tipo se materializó de la nada, sin ninguna fluctuación de chakra ni nada.
'este sujeto es peligroso'
Con solo una mirada, la mujer ojimiel pudo percatarse de cual de los dos recien llegados era con quien más debía tener cuidado.
Por ello se preparó mentalmente y comenzó a concentrar su fuerza.
*¡pum! *
"¡AAAAGGGHHHH!"
En eso, ese tipo recién llegado alzó la pierna y pisó el pecho del tipo que se había estrellado, sacando un grito de dolor proveniente debajo de la mascara naranja.
Las personas reunidas habían pasado por una situación de tortura, pero en este caso en particular, se estaban sintiendo extraños al ver esto, sin entender el por qué.
En eso, el tipo se agachó y cogió por el cuello al magullado hombre enmascarado, lo alzó y lo enfrentó cara a cara mientras le decía algunas palabras a mientras susurraba.
"Yare, yare… pensaba en ignorarte un poco mas de tiempo, pero tenías que darte cuenta de su actual situación. Ahhh… en verdad tenías que ser apresurado… espero que este pequeño 'castigo' será una advertencia para hacerte reflexionar las cosas pequeño uchiha"
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NOTA DEL AUTOR:
Chicos que tal, espero que bien. Aquí su amable autor deseandoles lo mejor para ustedes. Les quería informar una cosa: recuerden la temática de esta novela, para evitar problemas futuros.
Hace un par de días un lector hizo una reseña en donde insultaba la novela por que no aproveché la condición de Yuanba y sus Venas Tiránicas; así mismo, despotricó sobre el wincest.
Aunque su reseña fue muy agresiva, no se hizo visible ya que webnovel ahora esta dando shadowban a todo tipo de comentarios y reseñas con palabras ofensivas.
Escribir una novela es difícil, aunque parezca mentira. el solo poder redactar una cantidad de 1k de palabras puede costar un buen par de horas, incluso más para mí que tengo mi trabajo como médico de atención primaria.
Si revisas los capitulos de otros fanfic, verás que el promedio de palabras oscila entre los 1.5k a 2k. Yo he intentado mantener un ritmo de libaracion de casi un capítulo por día, con un promedio de 3k palabras, incluso algunos han tenido hasta 5k palabras.
Comencé a escribir esta novela como una especie de catarsis para relajarme.
Cuando leía una novela y algo no me gustaba, no iba a tirar hate por todos lados, lo que hice es escribir mi propia historia en donde pueda poner todo lo que me gusta y lo que no.
Por ello, les digo esto muchachos, las críticas constructivas son bienvenidas, ya que nos ayuda a crecer como autores, pero si eres muy 'exquisito' con las cosas, a tal punto de insultar y tirar hate por todos lados, te invito a escribir tu propia historia, verás que será algo como una forma de terapia para ayudarte a manejar eficientemente tu vida.
Saludos para todos amigos lectores, nos leeremos en el proximo capítulo.