¿Un trato mejor?
Li Yao recordó rápidamente que Xiong Wuji le había preguntado al comienzo de la conversación si podía o no reparar una nave. De repente sintió que estaba en algo. Sin embargo, la pregunta más importante para él no era cómo alejarse de la Meseta de Hierro, sino cómo resolver la miserable Maldición de la Muerte de la Araña Negra. Aunque la maldición no le produjo ningún dolor, no era como si tuviera que estar confinado a la cima de la etapa de refinamiento por el resto de su vida.
Reflexionando por un momento, Li Yao dijo:
— Jefe Xiong, en ese caso, ¡es una razón más de que deberíamos empezar a hacer un trato ahora! Estás construyendo máquinas de guerra. ¡Sé algo sobre la producción de sables, espadas y bombas de cristal, y puedo ayudarte a construir armas más poderosas! ¡Cuando llegue el apocalipsis, lucharé lado a lado contigo!
Xiong Wuji estaba algo desconcertado.
— ¿Vas a luchar contra el apocalipsis con nosotros?