Ya era tarde cuando terminó el evento. Los votos habían sido contados y verificados, y el maestro de ceremonias estaba encantado de anunciar los resultados unánimes de la degustación del menú por un panel de cinco críticos locales.
La batalla culinaria entre el restaurante Felicidad Oriental y la Reverie no solo fue entre los chefs profesionales y los estudiantes culinarios, sino que también mostró la diferencia entre la cocina occidental que la Reverie presentó y la cocina local de Felicidad Oriental.
El evento no fue para discutir qué comida era mejor ya que todo se redujo al gusto. No se trataba de qué comida era mejor, y nadie podría decirlo realmente, ya que eran muy diferentes. Sin embargo, era importante tener en cuenta las formas clave en ambas cocinas.