Nian Xiaomu ingresó al departamento de relaciones públicas y ya había cerrado dos proyectos principales, uno tras otro.
Su actuación fue realmente excepcional.
Wen Yadai no estaba exagerando en sus elogios.
Eso la hacía parecer como alguien que recompensaba y castigaba con justicia.
—Hablando de eso, una vez tuve dudas sobre la Supervisora Nian cuando apareció por primera vez en nuestro departamento. Sin embargo, no me esperaba que, no solamente estuviera familiarizada con todas las habilidades de relaciones públicas, sino que también tuviera un buen talento lingüístico. Su fluidez en el italiano está casi a la par con el del Joven Amo Han...
*¡Ejem!*
Yu Yuehan tosió de golpe.
Él entrecerró su mirada y un color rojo apareció en su rostro.
—Joven Amo Han, ¿se siente mal? —Wen Yadai preguntó preocupada en cuanto escuchó la tos de Yu Yuehan.