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Cuando vio la hermosa cara de Feng Tian Wu revelando una expresión estupefacta, Duan Ling Tian dijo:
—Tian Wu, si quieres un arma espiritual de tercer grado, entonces el Gran Hermano Duan puede refinar una para ti… Pero el Gran Hermano Duan temporalmente no lo hace posee los materiales necesarios para refinar las armas espirituales de grado tres, así que necesito que te lo proporciones.
Las palabras de Duan Ling Tian fueron extremadamente casuales, y fue como si perfeccionar un arma espiritual de tercer grado no fuera nada para él. Por supuesto, en realidad, refinar un arma espiritual de grado tres no era nada para Duan Ling Tian.
—Gran Hermano Duan, tú… ¿Quieres ayudarme a refinar un arma espiritual de tercer grado?