—Tengo los resultados de la autopsia —dijo Jeanne.
El corazón de Mónica latía acelerado.
Jeanne abrió el informe en su teléfono y lo colocó frente a Mónica. —El niño murió a causa de una alta concentración de inyección de cianuro de potasio.
—¿Cianuro de potasio? —Mónica estaba impactada.
Aunque no había trabajado mucho en la empresa, había estado expuesta a medicamentos desde joven y tenía cierto conocimiento sobre los ingredientes tóxicos más graves.
Ingerir entre 50 y 100 mg de esa droga podría causar la muerte repentina. La muerte ocurre con dificultad para respirar, aumento de la presión arterial, mucosa de piel roja brillante, convulsiones, crisis y, finalmente, la muerte por relajación muscular general y paro respiratorio y cardíaco.
Fue una muerte muy dolorosa.
Jeanne miró a Monica y dijo:
—Es imposible que una vacuna contenga una dosis tan alta de ingredientes tóxicos.