Tang Jianming y Lin Shulian también estaban preocupados. Si había que comparar a Su Bei con Tang Yue, sería demasiado trágico. Ya habían preparado palabras de consuelo para Su Bei.
—Su Bei, el éxito o el fracaso no significan nada. Además, no naciste en la familia Tang y no recibiste mucha orientación de tu abuelo. Además, la situación con esa parcela de tierra es desfavorable. Todos lo saben en su corazón —Lin Shulian la consoló.
Tang Yue puso una mirada pensativa en su cara y dijo:
—Mamá tiene razón. No te desanimes. En ese momento, dijiste que querías firmar un acuerdo. Si logras resultados o no, dijiste que no querías nada de la familia Tang. Te aconsejé que no lo apostaras todo, para que no te arrepintieras. Mira ahora, no escuchaste mi consejo. Ahora que el acuerdo ha tomado efecto, ya no puedes pedir nada de la familia Tang y del Abuelo. Con el centro comercial en este estado... ¿En el futuro no tendrás que trabajar más duro para mantener tu nivel de vida?