Marianne pov
—¿Sabe padre que estás aquí? —pregunté, esperando que se distrajera para así atacar su debilidad.
Realmente estaba arrepentida de llevar el vestido largo, se enredaba en mis pies mientras intentaba moverme.
—Tu posición no es lo suficientemente fuerte para un ataque, aumenta el espacio entre tus piernas, sí y dobla ahí, bien. Ahora intenta. Y no, padre no sabía que estoy aquí, pero madre sí. Sabes cómo padre te favorece. Nunca me dejaría venir aquí.
—Hubo un tiempo en que padre me favorecía, hermano. Ya no me quiere. —dije mientras daba un paso atrás para defenderme, pero él se lanzó hacia mí.
—Hermano, ¿realmente quieres matarme esta vez? —pregunté con una mirada fulminante. Sabía que no estaba usando toda su fuerza, pero tampoco mostraba misericordia.
Él alzó una ceja ante mi declaración,
—No arrojes tu debilidad sobre mí. Te has vuelto débil y patético.