บท 29: Capítulo 29: Asagi es una buena actriz
"Maestro no es necesario hacer esto" – Asagi me miró con preocupación, una de las pocas veces que ella muestra emociones tan sinceras lo que conmovió un poco.
"Es la única forma" – Me ajusté los lentes, es decima vez que lo hago en los últimos 2 minutos, creo que tengo un tic nervioso.
Asagi me miró fijamente y luego apartó la mirada. – "Me aseguraré de que el Maestro este a salvo"
"Gracias" – Sonreí un poco, pero era difícil por lo enfermó que me sentí.
Después de que pedí a Enma que buscara a las dos niñas desaparecidas ella encontró algunas pistas.
Ambas niñas fueron secuestradas por el Club de Caballeros, lo que es aún peor es que no habían sido reportadas como desaparecidas ya que sus familias fueron engañadas creyendo que ambas niñas fueron a un curso privado para mejorar el desempeño académico.
Tuve la necesidad de buscar a ese par de familias y golpearlos en las cabezas con un bate de beisbol para ver si se derramaba la basura que tenían en las cabezas.
No sé si vivir en un país seguro hace que las personas se vuelvan ingenuas o es debido a que este mundo sigue la lógica del Hentai ya que las dos niñas llevan 5 días secuestradas y nadie parece encontrarlo extraño.
Enma y Asagi encontraron el lugar aproximado donde estaban ambas niñas, pero les ordené que se alejaran ya que resultó ser un hotel administrado por el Club de Caballeros y sería peligroso para ellas dos si intentaban acercarse.
A pesar de que tuve un ataque de pánico, pude controlarme después de tomar 4 pociones de extraños colores.
Enma me sugirió contactar a Tanaka ya que él es mi enlace con el Club de Caballeros y pregunté por las dos niñas diciendo que ambas me interesaban para volverlas mis juguetes personales.
Después de que vomité hasta escupir jugos gástricos debido a la culpa, Tanaka me dijo que era un asunto complicado y que si quería que habláramos debíamos vernos en el Hotel Milagro de Verano, uno de los hoteles mas lujosos de la ciudad famoso por su casa de subastas.
Ya que este Hotel es un punto de encuentro para personas importantes, hay reglas que se deben seguir.
La primera es que no se pueden traer mas de 4 guardaespaldas humanos y solo un guardaespaldas sobrenatural. También se puede traer a un amante o asistente, pero no deben ser entidades mágicas.
Traje 4 exsoldados como mis guardaespaldas, Shaku será mi guardaespaldas sobrenatural y Asagi actuará como mi asistente.
Asagi se cambió de apariencia y parece una mujer totalmente diferente lo que evitará que otros la reconozcan ya que el grupo Taimanin es enemigo del Inframundo.
Enma y Kiara están ocultas en mi sombra, pero solo saldrán en caso de emergencia, por ahora están dormidas para evitar que entidades mágicas especializadas en detección puedan rastrearlas
Es casi media noche, ahora mismo estoy sentado en mi limusina de camino al hotel ya que hoy habrá una gran subasta con productos novedosos y artículos de colección para aquellos que aprecian la verdadera calidad… Así lo promocionan, en realidad es una asquerosa subasta de esclavos.
Traje una tarjeta de crédito con suficiente dinero para comprar Centroamérica por lo que puedo cumplir mi misión, el problema es que mis propios valores morales sufren ante la idea de comprar personas como si fueran productos desechables.
De hecho, mi estomagó colapsó 4 veces en solo medio día, si no fuera por la poción que me dio Kiara pude haber muerto por un derrame intestinal. Luego me haré un chequeo médico.
Es también por eso por lo que Asagi me ha insistido que es mejor no ir a la subasta, si mi estrés sigue aumentando mi salud estará en peligro, pero mi reloj es un artefacto de almacenamiento espacial lleno de pociones curativas así que estaré bien, eso espero.
"Maestro, si va a hacer esto entonces tiene que escucharme en todo momento" – Asagi suspiró y luego me miró a los ojos con seriedad.
Asentí. Comprendo las preocupaciones de Asagi, estamos entrando en la boca del lobo donde un mal movimiento pondrá en peligro a las personas que quiero proteger.
"Bien" – Asagi asintió. – "Y recuerde Maestro, incluso si tiene el dinero para comprar a todas las personas que vendan, no debe hacerlo"
Apreté los dientes, el sentimiento de impotencia era doloroso.
Hay una regla no escrita en esta clase de eventos donde un solo comprador no puede llevarse todos los productos ya que hacerlo causará el disgusto de los demás invitados.
A pesar de que tengo el dinero para comprar un continente, las personas involucradas con el Inframundo pueden actuar de forma irracional y violenta cuando se les provoca lo que solo me dará enemigos mientras que no tengo aliados.
Puedo tener riqueza, pero carezco de autoridad, incluso con todo mi dinero no puedo comprar a todos los seres poderosos de este mundo en poco tiempo así que solo puedo cerrar los ojos enfurecerme en silencio.
Finalmente llegamos al hotel, al frente y detrás de mi limusina había dos camionetas escoltándome que es donde están mis guardaespaldas.
Después de que el chofer confirmara mi identidad con los guardias de seguridad nos dejaron pasar y entramos al estacionamiento subterráneo, luego entramos por una entrada secreta para dirigirnos al área subterránea del hotel que era donde se llevaba a cabo la verdadera subasta.
En la superficie se comercia con arte, joyas y reliquias antiguas, es en el subterráneo donde lo peor de la clase alta muestra sus verdaderos colores, claro, no toda la gente rica es malvada, pero los que realmente lo son tienen los recursos para respaldar esa maldad.
"Vamos Maestro" – Asagi se puso salió de la limusina y mostró un comportamiento extremadamente respetuoso.
Salí de la limusina y frente a nosotros estaba una hermosa mujer con un cuerpo digno de una actriz porno, su comportamiento era cortes y con su uniforme se veía como una hermosa asistente que todo hombre soñaría tener, aunque sinceramente, Asagi es más linda.
"Es un placer tenerlo con nosotros Yamada-sama, ya que es la primera vez que nos visita permita ser su guía" – La mujer hizo una reverencia mostrando lo profundo que era su escote.
Asagi me explicó que este tipo de tácticas era normal para complacer a los clientes y si yo lo pidiera podría acostarme con esta asistente, pero solo tenerla cerca me esta estresando debido a lo hermosa que se ve, así que prefiero no hacerlo.
La mujer continúo sonriendo de forma encantadora que me dio escalofríos. – "Antes de entrar tendré que pedirle a Yamada-sama que llene un registro con sus acompañantes"
Ya escuché de esto por lo que registré a los 4 exsoldados como mis guardaespaldas, a Asagi como mi secretaria y llamé a Shaku para registrarla como mi guardaespaldas sobrenatural.
La asistente femenina no perdió su sonrisa amable incluso cuando sintió la penetrante atmosfera de muerte de Shaku lo que me hizo alabarla internamente, incluso a mí me asusta un poco cuando Shaku sale de mi sombra.
"Yamada-sama es un hombre impresionante al tener una escolta tan sobresaliente" – La mujer mostró una expresión sorprendida mientras actuaba como una colegiala que conoció a su ídolo.
Ignorando el obvio intento de adulación, sonreí cortésmente intentando pensar en videos de gatitos para no entrar en pánico, ver sus grandes pechos rebotar fue incómodo. – "Lo agradecería"
La asistente mostró una linda sonrisa y comenzó a caminar delante de nosotros para llevarnos a nuestra habitación privada. En toda esta interacción, ella no dio una sola mirada a Asagi ya que debe pensar que Asagi es una mera amante desechable, este lugar me enferma.
Llegamos a nuestra habitación, antes de venir hice una reservación y pagué una obscena cantidad de dinero para recibir el servicio VIP ya que cuanto mas muestre mi riqueza el hotel me dará favoritismo lo que facilitara esta misión de rescate, además de que con el servicio VIP hay menos riesgo de que el personal del hotel intente espiar mis acciones por temor a perder a un buen cliente.
Cuando entramos a la habitación pensé que viajé a otro mundo, el lugar era incluso mas lujoso que mi mansión.
Las decoraciones eran hermosas piezas de arte que incluso un cerdo inculto como yo podía apreciar de todo corazón, lo mejor es que a pesar de lo extravagante del lugar, los colores y materiales preciosos no eran exagerados lo que impedía que uno se sintiera enfermo con tanto lujo, me gustó el lugar.
En la parte principal de la habitación había una enorme pantalla de plasma de alta resolución, con ella podríamos ver la subasta.
El escenario de la subasta parecía un auditorio de opera con mesas donde los invitados podían sentarse con sus acompañantes y pedir comida y bebida durante el evento.
Algunos usaban disfraces para ocultar sus identidades y otros mostraban sus rostros sin temor a ser expuestos.
Por mi parte, me gustaba mas esta habitación privada ya que así nadie me verá llorar cuando me sienta miserable al no poder ayudar a otras personas, al menos hay una suave alfombra de terciopelo por si me arrojo al suelo ahogado por mi propia miseria.
"Yamada-sama, la subasta comenzará en 10 minutos" – La asistente nos mostró el lugar y luego me sonrió de forma afectuosa, usar afecto en lugar de lujuria es trampa.
"Me gusta, gracias" – Sonreí evitando mirar a la asistente ya que soy débil hacia la amabilidad y afecto y no quiero caer en una trampa de miel.
Saqué una moneda de oro de mi bolsillo y casualmente la arrojé a la asistente. – "Un excelente servicio"
En esta clase de eventos y servicios se manejan monedas de oro ya que el papel moneda puede devaluarse en cualquier momento mientras que el oro y joyas son más estables.
Ya sea pagar a una mujer por servicios sexuales, comprar personas o contratar sicarios, todo se hace a través de estas monedas de oro sin marcas que pueden usarse en cualquier parte del mundo, es similar a la película John Wick.
Dar una moneda de oro como propina es un acto derrochador incluso en la clase alta, solo las mejores prostitutas con fama internacional cobrarían una moneda por una semana de servicios así que estoy siendo demasiado extravagante, pero realmente quiero que esta mujer deje de mirarme como una doncella enamorada.
Una vez más demostrando que soy un estúpido que no conoce las interacciones humanas, la hermosa asistente no se fue y en su lugar sus ojos parecían convertirse en corazones.
"Ya que Yamada-sama es tan generoso esta humilde sirvienta puede atenderlo de todo corazón" – La mujer hizo una humilde reverencia mostrando los mejores modales que he visto.
Me duele la cabeza.
"Gracias, pero por ahora quiero disfrutar un tiempo a solas con mi linda asistente" – Sonreí mientras sostuve la mano de Asagi de forma cariñosa.
Asagi no rechazó mi movimiento y en realidad mostró una expresión tímida muy adorable, una excelente actuación para engañar a la mujer avariciosa.
La expresión de la mujer no cambió en lo más mínimo impidiéndome saber si estaba enojada o no, es muy profesional. – "Es una lástima, en ese caso me retiro, si Yamada-sama necesita cualquier cosa no dude en llamarme y atenderé cualquier deseo de Yamada-sama"
"Mmm ya que lo mencionas me gustaría un buffet de panqueques" – Solo los panqueques pueden aliviar mi sufrimiento interno.
Miré a Asagi con una sonrisa amable. – "¿Quieres algo cariño?"
En el camino hablé con Asagi y decidimos fingir que teníamos una relación cercana a pesar de ser jefe y secretaria, de esta forma las asistentes y camareras no me estarán acosando por mi riqueza.
No era extraño que algunos magnates o políticos que venían a estos eventos trajeran a una amante o a sus esposas, después de todo no todos los esclavos eran con fines sexuales ya que algunos eran usados como juguetes desechables, sacos de boxeo, material para rituales o guardaespaldas.
Incluso había personas que compraban esclavos para usarlos como muñecos de pruebas para que sus guardaespaldas practicaran sus punterías con armas de fuego, después de todo disparar a un objetivo vivo y con inteligencia es más difícil.
Si, el mundo es horrible.
Asagi negó, su expresión era un poco tímida y había empezado sonrojarse, ella es muy buena actuando, eso debe ser, ella jamás podría desarrollar sentimientos por alguien como yo.
"Entonces me retiro, disfrute del evento Yamada-sama" – La asistente finalmente se fue y cerró la puerta.
Solté la mano de Asagi y dejé salir un profundo suspiro. – "Es aterrador como sonríe"
Un guardaespaldas me sonrió y levantó un pulgar. Lo llamaré Guardaespaldas A. – "Yamada-sama es asombroso, dándole una moneda de oro a una insignificante asisntente como si fuera una piedra en el camino, cuando esto se sepa las mejores mujeres de este lugar vendrán intentando complacer a Yamada-sama"
Mi rostro se puso pálido, mi cultivo en el Dao de la Estupidez tuvo un gran avance.
Guardaespaldas B comenzó a reír. – "Jajaja, Yamada-sama, cuando esas mujeres vengan nos quedaremos afuera para darle privacidad, usted no tiene que preocuparse"
Si no fuera porque ellos están bajo un contrato de esclavitud que Enma les puso, me harían pensar que están burlándose de mí. En realidad, es peor que ellos estén hablando en serio.
Guardaespaldas C sonrió obscenamente. – "Yamada-sama, cuando usted termine de jugar con ellas debería dejarnos al menos un par"
Quiero vomitar…
Guardaespaldas D golpeó la cabeza de Guardaespaldas C. – "¡Idiota! Estamos aquí para proteger a Yamada-sama, no para jugar"
Me agrada Guardaespaldas D, le daré un aumento.
"¡CALLENSE PEDAZOS DE MIERDA!"
Todos nos pusimos rígidos cuando escuchamos una voz que parecía salida de las profundidades del infierno.
"¡¿Ustedes montón de escoria creen que mi Maestro es la misma basura putrefacta que ustedes?! ¡Si dicen otra palabra convertiré sus entrepiernas en vaginas y los encerraré con los orcos durante un año!" – Asagi gritó mientras emanaba una intensa sed de sangre.
Toqué mis pantalones y me alegré al notar que no me oriné.
Los 4 guardaespaldas asintieron repetidamente como pollos comiendo arroz, luego fueron a una esquina de la habitación y se sentaron sin hacer el menor ruido.
Aunque ellos son exsoldados de elite que fueron expulsados del ejercito por diversos crímenes, ahora solo eran ratones asustados que presenciaron la furia del tigre.
"Ejem, lo siento Maestro, perdí un poco el control" – Asagi volvió a su expresión tranquila.
"De-Descuida" – Fingí que no estuve a punto llorar como una niña asustada.
Fui al asiento frente a la pantalla de plasma que abarcaba toda la pared y me senté mientras me juraba a mí mismo no hacer enojar a Asagi, realmente siento lastima del pobre imbécil que se vuelva su esposo.
De hecho, se supone que Asagi ya tiene a alguien que ama y estará con él cuando la situación de su familia sea mejor…
Que raro, por alguna razón quiero llorar, debe ser el estrés.
"Veamos cómo van las cosas e intentemos no arruinarlo" – Me estiré en el asiento, es muy cómodo, veré si están dispuestos a venderme uno.
"Me asegurare de que todo salga bien Maestro" – Asagi se sentí en el asiento a mi lado, entre nosotros había una pequeña mesa de cristal con un control remoto para manejar la pantalla de plasma.
"Me lo decía a mí mismo" – Sonreí con ironía, estoy nervioso.
Bien, puedo hacerlo… No, en realidad no puedo hacerlo, pero tengo pociones que evitaran mi muerte por estrés así que todo saldrá bien.
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