บท 372: ¡Partiendo hacia la Tierra Divina!

Esto definitivamente era algo bueno.

Dado que el Veneno del Corazón Helado era virulento, el veneno refinado de él debería ser útil.

—Continúa —dijo Leng Rushuang.

Jian Wushuang asintió y luego continuó devorando y refinando el Veneno del Corazón Helado del brazo de Leng Rushuang.

Después de ganar experiencia la primera vez, los intentos subsiguientes fueron mucho más fáciles.

Medio día pasó en un abrir y cerrar de ojos.

—Doce gotas.

Después de que la última gota cayó en la botella de jade, una sonrisa se dibujó en el rostro de Jian Wushuang.

El último del Veneno del Corazón Helado en el brazo de Leng Rushuang finalmente había sido refinado y su brazo también estaba mejorando.

—Gracias —dijo Leng Rushuang, mientras se bajaba la manga.

Jian Wushuang encogió de hombros y sonrió, luego dijo:

—Solo puedo refinar el Veneno del Corazón Helado que se filtró. No puedo hacer nada sobre el veneno que está sellado.