Abro los ojos y siento un brazos en mi cintura, miro y es Tiago quien abre los ojos y sonríe.
-Buenos días gatita- me dice y yo sonrío.
-Buenos días- contesto y me levanto para ir al baño, me doy una ducha con agua caliente y al salir Tiago está cerrando la puerta, el me mira de pies a cabeza.
-Te pedí ropa- me dice y yo sonrío ya que estaba en toalla.
-Gracias- le digo, el sonríe y camina al baño, la ropa es linda, es un vestido rosa con unas zapatillas, me lo pongo y cuando termino de peinar mi cabello el sale del armario con un traje gris que le queda súper bien.
-¿Te gusta lo que ves?- me pregunta y me doy cuenta de que lo mire mas de lo normal.
-Ya quisieras- le digo rodando los ojos pero mi cara me delató.
-Se que te encanto- dice el con su ego por los cielos.
-Ya bajemos- le digo y lo tomo de la mano para salir y el ríe.
-¿Lo vas a aceptar?- pregunta bajando la escaleras.
-¿Qué?- le pregunto.
-Que te encanto- dice el tiene mucho ego.
-¿No crees que tienes el ego muy grande?- le pregunto y el niega, yo sonrío- pues piénsalo.
-Ya lo pensé y es un si- me dice al final de la escalera.
-¿De verdad?- le pregunto y el asiente, jamás pensé que lo iba a acepta.
-Esta confirmado… te mueres por mi- dice al final y es que tenia que haber sabido que el seguía con ese tema.
-Y dale con el tema- le digo con irritación.
-Es que solo tienes que aceptarlo gatita- dice y me abraza por detrás para poner su barbilla en mi hombro.
-Como digas- le digo y el ríe- te encanta hacerme enojar, ¿verdad?
-la verdad si, te ves muy linda enojada- dice el sin ningún remordimiento y yo lo miro ofendida pero cuando voy a replicar su prima Carla aparece.
-Buenos días- dice ella.
-Buenos días- digo yo pero Tiago no dice nada.
-¿Cómo durmieron?- pregunta y Tiago suspira.
-No mucho pero de maravilla- dice el y yo me sonrojo ya que lo dijo con doble sentido y aunque es mentira igual el no tiene que decir esas cosas.
-Me imagino- dice ella y en sus ojos se ve la irritación y el enojo pero luego lo esconde.
-si, bueno gatita mejor vamos a comer y luego nos vamos- dice el y me arrastra al comedor.
-Hola chicos, ¿como durmieron?- pregunta María sonriendo y Tiago vuelve a suspirar pero antes de que hable yo hablo.
-Muy bien abuela, gracias- digo rápido, Tiago ríe a carcajadas y yo lo fulminó con la mirada.
-Cuéntanos es chiste hermano- pide Martín.
-No es nada- dice Tiago aún riendo y me ayuda a sentar.
-¿Seguro?- pregunta su padre.
-Si, solo que a él le encanta molestarme- digo y Tiago ríe más.
-No te conocía ese lado- dice Martín a Tiago y el se encoge de hombros.
-Digamos que Sofía sacó a relucir muchos lados de mi que ni siquiera yo conocía- dice el pero me mira a mí y yo le devuelvo la mirada.
-Ya lo noté- dice su abuelo riendo- pero eso es bueno, solo no la molestes mucho no valla a ser que te deje plantado- eso hace que Tiago se ponga serio.
-Ni se te ocurra- me dice y yo me encojo de hombros.
-De aquí a dos semanas falta mucho y puede pasar de todo- le digo para provocarlo y su rostro se oscurece.
-Ni se te ocurra- dice con un tono cargado de amenazas.
-¿O si no que?- le pregunto enarcando una ceja y el sonríe.
-Te buscaré en cada rincón del mundo y cuando te encuentre…- deja el resto a la imaginación, yo rio y le tomo la cara.
-¿Ves que no es divertido que te molesten?- le pregunto y el me mira confundido- era broma tonto, jamás te dejaría plantado.
-Mas te vale- me dice y yo rio.
-No aguantas nada- le digo y el me mira.
-Con eso no se juega- dice ahora enojado.
-¿Estás enojado?- le pregunto pero el no me mira, le tomo la cara y le beso la mejilla- lo siento, no volveré a jugar con eso.
-¿Lo prometes?- pregunta y yo asiento, el se acerca y me besa los labios dejándome sorprendida- bueno tampoco es que yo te hubiera dejado ir.
-Mmh- tarareo y el sonríe.
-Es cierto, aunque seas una amarrada en dos semanas serás mi esposa- dice el con una sonrisa brillante, empiezo a creer que es bipolar, en un momento está feliz al otro enojado y viceversa.
-Eso ya lo tenemos claro y nadie te la va a robar- dice Enzo riendo y Tiago lo mira mal.
-¿Quién pidió tu opinión?- le pregunta con irritación.
-Yo hablo lo que quiera porque la boca es mía- le contesta Enzo.
-No vallan a empezar por favor- dice Adriana y ambos asienten sin dejar de mirarse, es como una batalla- Tiago... Enzo
-¡Gane!- exclama Tiago cuando Enzo quita la mirada y este último le saca la lengua asiendo que yo ría y todos me miren.
-Pareces un niño amor- le digo a Tiago y mira a Enzo.
-Es que Enzo es un bebé que no colabora- dice Tiago en su defensa.
-Y tu eres un bebé grande con novia- le dice Enzo.
-Por lo menos tengo una- le dice Tiago.
-A la cual le voy a pedir que te deje plantado- le dice Enzo.
-Ella no te hará caso- dice Tiago.
-¿Por qué no?- le pregunta Enzo- yo le diré que comías tierra.
-Ese eras tú- dice Martín y Enzo lo mira y le hace señas para que se calle.
-Pero ella no lo sabe, no te metas- le dice Enzo a Martín.
-Me meto porque soy el mayor- le dice Martín.
-Y yo soy el menor y al que más quieren- dice Enzo y mira a María- ¿verdad abuela?
-A mí no me metas mocoso- le responde María.
-No les hagas caso, les falta un tornillo- me dice Tiago y yo rio.
-Lo que me faltaba. ¿Por qué me dejas en mal con mi cuñada?- le dice Enzo y luego me mira- no lo escuches, lo dice porque yo soy más guapo y no quiere que te enamores de mí.
-Tú no eres el más guapo, ese soy yo- dice Martín y ahora se que viene de familia ser tan egocéntrico.
-¿Para que discuten si el más guapo e inteligente soy yo y todos lo sabemos?- pregunta Tiago y pasa su brazo por mis hombros.
-Mami di tu la verdad- dice Enzo mirando a Adriana y ella sonríe encogiéndose de hombros- di la verdad mamá. ¿Quien es más guapo?
-Los tres lo son- dice ella.
-Elige a uno- dice Martín.
-Los tres porque son tres gotas de agua, ¿no ven que se parecen demasiado? Los tres son idénticos a su padre- dice ella y los tres se cruzan de brazos.
-Pero…- Enzo quería decir algo pero luego se detiene- tu Sofía, di quién es más guapo
-¿Yo?- pregunto señalándome y el asiente.
-Elige a uno- dice y todos me miran. Los miro a los tres, uno a la vez y busco sus diferencias.
-¿Por qué lo piensas tanto?- pregunta Tiago con el ceño fruncido.
-Porque Adriana tiene razón, son tres gotas de agua- digo y el se acerca más a mi.
-¿Quién te parece más atractivo?- pregunta Tiago rozando nuestros labios.
-Eso no se vale, está apunto de besarla mientras se lo pregunta, eso es trampa- dice Enzo y yo trato de mirarlo pero Tiago toma mi rostro y hace que lo mire solo a él.
-Dime gatita, ¿quien te parece más atractivo?- vuelve a preguntar.
-Los tres lo son- insisto.
-Elige a uno- insiste Tiago.
-Tú- digo en un susurro, el sonríe triunfante y deja un pico en mis labios.
-Sabía que te encanto- me dice con sus labios presionando los míos.
-Es tu novia, obviamente le vas a parecer más atractivo- dice Enzo y Tiago lo mira y niega.
-Es que lo soy hermanito- dice con suficiencia.